CGT exige a la Junta de Castilla y León que restituya a los empleados públicos los derechos usurpados

Hace dos años la Junta de Castilla y León aminoró el contrato de relevo al colectivo de trabajadores laborales de la Administración Autonómica a la mitad. Así, la minoración de un cincuenta por ciento de la jornada laboral quedó reducida a un escuálido veinticinco por ciento, lo que supone que, por cada cuatro personas trabajadoras que se acogen a este tipo de contrato, la Junta de Castilla y León contrata a un solo trabajador.

Las condiciones de la reducción horaria de los trabajadores afectados por este tipo de contrato son arbitrarias y caprichosas, que nada tienen que ver con la organización del trabajo y/o las necesidades de los servicios. La aplicación vigente de este tipo de contrato por parte de la Administración tan sólo tiene como objetivo que el trabajador desista de solicitarlo, lo que implica un progresivo incremento del envejecimiento de la plantilla del personal laboral y, a su vez, una penuria de oportunidades del sector juvenil de la población activa. En la presente anualidad, 2019, un trabajador podrá acogerse a este tipo de contrato si tiene un mínimo de sesenta y un años y ocho meses, siempre que tenga cotizados treinta y cuatro años y nueve meses o más. 

El contrato de relevo ya resulta en si lesivo para las personas trabajadoras de las administraciones públicas respecto a las de empresas privadas y, sin embargo, son las administraciones públicas, como es el caso que nos ocupa de la Junta de Castilla y León, las que más trabas imponen a sus trabajadores para el ejercicio de sus derechos.

Por ende, desde la CGT de Zamora instamos al nuevo gobierno autonómico de la Junta de Castilla y León el que reconsidere la aplicación vigente de este tipo de contrato y retrotraiga la misma a la situación anterior o, en su defecto, la equipare a la que se está materializando en las empresas privadas.