Itálica 107 dona media tonelada de alimentos para aliviar la situación de los temporeros de Huelva

Las puertas de nuestros templos están cerradas, pero la Masonería no ha dejado ni un momento de existir. La Respetable Logia Itálica número 107 de la Gran Logia de España ha centrado su respuesta social en la dramática situación que viven los campamentos de temporeros de Lepe en Huelva con la donación de alimentos de primera necesidad. La pandemia del COVID-19 nos ha confinado a todos en nuestras casas. Hay otras realidades invisibles. Las de aquellos que no tienen, siquiera, un techo bajo el que confinarse dignamente.

Ciertamente, estos días los temporeros son noticia. Nuestra agricultura, uno de los sectores que no ha visto paralizada su actividad, afronta los cierres de fronteras decretados por distintos gobiernos, que están impidiendo la llegada habitual del refuerzo de migrantes. La recogida de la producción de fresa de 2020 está en riesgo. Esta noticia, cuyo impacto económico es innegable, eclipsa el drama social que están viviendo aquellos temporeros que residen de forma permanente en asentamientos chabolistas en torno a los pueblos freseros. 

Philip Alston, relator especial sobre la extrema pobreza y los derechos humanos de la Organización de las Naciones Unidas, los visitó en febrero, semanas antes de la declaración del estado de alarma. Dijo de ellos que vivían "como animales” en asentamientos "a kilómetros de distancia del agua, sin electricidad o saneamiento adecuado” en "condiciones mucho peores que un campamento de refugiados”. Esas fueron sus palabras. Itálica 107 ha logrado reunir media tonelada de arroz, pasta, leche, tomate frito y aceite. “Somos conscientes de que no solventaremos el problema, pero nuestra pequeña ayuda servirá para aliviar el drama de los más desprotegidos y necesitados”.

La Gran Logia de España es representante en España de la regularidad masónica y, por tanto, el cuerpo masónico que mantiene lazos de amistad y reconocimiento con todas las Grandes Logias regulares del mundo. Con ellas comparte los antiguos principios de la Fraternidad masónica universal, así como una Tradición iniciática que explica la extraordinaria vitalidad que la francmasonería aun conserva en nuestros días. La Gran Logia de España, único cuerpo masónico al que pertenecen la práctica totalidad de los masones españoles, es además depositaria del legado del histórico Grande Oriente Español, fundado en 1889.