La pandemia se podía haber gestionado mejor

Este año que finaliza pasará a nuestra historia por ser el de la formación del primer Gobierno de coalición entre socialistas y comunistas, y por su desastrosa gestión de la pandemia originada en Wuhan.

En el Chernobyl de la URSS se encuentra un antecedente sobre el modelo de gestión de una catástrofe ambiental provocada por el propio comunismo. Allí, se ocultó el desastre en la central nuclear "Vladimir Ilich Lenin" hasta que se detectó radiactividad ambiental en Escandinavia, varios días después del desastre. Muchos operarios rusos, los liquidadores, murieron al tratar de reparar sin protección el reactor. El desastre fue debido a una mezcla de incompetencia, ocultación de datos y desprecio por la vida de la población.

En 2019 el comunismo chino ha vuelto a repetir el mismo patrón de comportamiento. No tenemos certeza del origen de la pandemia pero nos dicen que comenzó en un mercado de Wuhan, ciudad dónde casualmente hay un laboratorio estatal en el que se llevan a efecto investigaciones desconocidas con coronavirus.
Parece que el primer caso acreditado se produjo el 17 de noviembre y que el 1 de diciembre ya se hablaba de un brote de una extraña infeccion. Se ocultó información, se tomaron medidas tarde y equivocadas, se negó la gravedad de la situación y por ello no se aisló el foco en China, provocando su expansión al resto del mundo. Había que salvar el "prestigio" de China y el comunismo.

Cuando ya se había expandido fuera de la zona, se confinaron en sus domicilios de Wuhan a 50 millones de personas el 23 de enero, lo que hacía suponer que algo grave debía ocurrir.

El 21 de febrero se diagnosticaron los primeros casos en Italia, y un día después se confinó la región de Milán.

Mientras, el Ministro de Sanidad estaba de conversaciones con la Esquerra para constituir una "mesa bilateral de diálogo, negociación y acuerdo para la resolución del conflicto político de Catalunya". La salud no era su prioridad.
Fernando Simón aseguraba el 31 de enero que "España no va a tener, como mucho, más allá de algún caso diagnosticado". El Gobierno se creía sus mentiras y actuó en consecuencia: no hizo nada.

Se hartó Simón de decir que las mascarillas eran peligrosas y nocivas para los sanos, con la población ya confinada. El 8 de mayo, el "sabio" rectificó su criterio. No ha dimitido ni ha sido cesado.

El 24 de enero, Vox propuso realizar controles a viajeros provenientes de China e Italia. Rocío Monasterio en las redes sociales decía “Cada mes entran por el Aeropuerto de Barajas 15.000 chinos, en el Gobierno dicen que no toman medidas porque no hay vuelo directo desde Wuhan. No tomar medidas inmediatamente en el aeropuerto es de una irresponsabilidad brutal, no puedo entender a qué esperan”.

El 30 de enero, Vox denunció que Sanidad no estaba adoptando las recomendaciones de la OMS. "Al Ministerio parece no importarle mucho la seguridad del personal sanitario".

El doctor Steegmann, portavoz de Sanidad de VOX en el Congreso de los Diputados, emplazó al Ministro Illa el 27 de febrero a «tomar medidas de restricción en vuelos para impedir la entrada de pasajeros que vienen de China o Italia, así como medidas de contención». «Ustedes empezaron mal. Nosotros se lo dijimos hace un mes. No traspusieron las instrucciones de la Organización Mundial de la Salud para proteger al personal sanitario y la habilitación de salas especiales. Siguen actuando lentos».

Se acusó a VOX de alarmistas, racistas y xenófobos por exigir medidas en febrero, para luego confinar a la población el 15 de marzo, después de celebrado ya el infectódromo feminista del 8 de marzo. Era tarde, el virus había entrado procedente de China e Italia y se habia distribuido en esas manifestaciones.

Jamás ha aceptado este Gobierno incompetente un solo consejo o propuesta de quien ha demostrado más preparación y conocimiento. En fin, el Dr. Steegmann clamaba en primavera sobre la necesidad de realizar test masivos a la población y la utilidad del uso de las mascarillas, cuando el Gobierno las desaconsejaba.
En YouTube  buscando "Steegmann en el Congreso", se puede encontrar lo que proponía VOX en esos momentos. Se puede observar que en nombre de VOX aportó en cada momento medidas constructivas y útiles. Se hubiera podido evitar gran número de muertes y sufrimiento.

En España para el Gobierno social-comunista lo único importante era la procesión laica del 8 de marzo, el "Día de la Mujer". Son inolvidables por macabras y criminales las palabras de Carmen Calvo invitando a manifestarse a las mujeres. "Les va la vida" decia, y casi pierde la suya al infectarse en esa manifestación del 8 M, al igual que Irene Montero o la mujer de Sánchez. "El machismo mata más que el coronavirus" era una de las consignass más repetidas por esa banda de iluminados. En YouTube aparece una antología de ese esperpento.

Todos recordamos durante el confinamiento cómo saliamos de casa siempre sin mascarilla, para ir a comprar alimentos u otras necesidades y obligaciones básicas. Ahora sabemos que el Gobierno no había sido capaz de proporcionar mascarillas a la población, y ese era el único motivo para no recomendar su uso.

La incompetencia del Gobierno hizo que la población civil tomara medidas de autoprotección. Recordamos las imágenes de los sanitarios protegidos con bolsas de basura. Fueron incapaces hasta de proporcionar hidrogel a los hospitales. Sirva de ejemplo en Zamora que el IES Maria de Molina el 22 de marzo aprovechó su laboratorio escolar para abastecer de gel al Hospital. Loable y lamentable a la vez.

Esta mala gestión de la crisis ha provocado la máxima mortalidad de los países del entorno, la mayor e irreparable desgracia.

Pero el 10 de junio el Sr. Sánchez en el Congreso afirmó sin que se le moviera un pelo "Hemos vencido al virus". Este es el Jefe. Sin comentarios.

En la segunda ola epidémica que todos esperábamos, el Gobierno se ha apartado del medio dejando la responsabilidad de la gestión del "virus vencido" a las Comunidades Autónomas que están demostrando su ineficacia en esta pandemia. El criterio de gestión es meramente administrativo, no sanitario. Cada Comunidad va a su aire, no hay criterios comunes, se producen cambios de opinión absurdos. Cuando escribimos estas líneas no se sabe cómo podremos celebrar la Navidad y mientras por ejemplo, es posible trasladarse de Ponferrada a Soria o Ávila, no lo es viajar al pueblo limítrofe distante pocos km, si pertenecen a distinta Comunidad Autónoma. Medida puramente administrativa, incomprensible desde el punto de vista sanitario, como tantas otras.

En VOX Zamora estamos seguros que a pesar del Gobierno y su nefasta gestión, ahora complementada por el absurdo sistema autonómico, España saldrá adelante y superará esta crisis sanitaria, económica y social. Pero también estamos seguros que pudo haber sido todo menos dramático con otras políticas más inteligentes y distintas de las aplicadas por este Gobierno.
VOX ZAMORA.