El Amigos del Duero vuelve a la Ciudad Deportiva para regalarle una victoria

El partido comenzó con ligero dominio de las de Nacho Merino, más centradas en la posesión del balón para darle opción a sus delanteras de salvar la defensa rival. Pudo suceder a las primeras de cambio (minuto 4) cuando Alba Fariza se escapaba de su contraria  y fue agarrada clarísimamente, sin que ni colegiado ni juez de línea –mejor situado- castigaran el claro penalti.

El Burgos fue estirando sus líneas y comenzó, con ello, a llegar con cierto peligro a la portería contraria, principalmente en las botas de Elisa Cisneros, que tuvo dos ocasiones, cruzando el balón demasiado y otro que fue interceptado por Sara, en lo que sería el primer disparo entre los tres palos hasta ese momento.

A falta de 5 minutos para llegar al descanso, Alba Fariza se escapó por su banda derecha y fue cambiando el rumbo hacia la portería contraria según avanzaba y, cuando parecía que tenía todo a su favor, tuvo un gesto generoso, pasándole el balón a Vir, quien finalmente, lo estrelló contra el larguero en un fuerte disparo.

En la segunda parte, apenas comenzada, las de casa botaron un córner desde su banda derecha. El fallo de la portera creó un barullo que fue aprovechado por Lara para empujar el balón desde la misma línea.

Tras encajar el gol, el Burgos se posicionó más adelantado, presionando y afilando sus acciones  en busca del empate, pero las anfitrionas cerraron filas, los cambios de Nacho les dio aire y se estiraban también, cuando podían, en busca del segundo gol, que no llegó. Sí pudieron empatar las burgalesas, pero se encontraron con una gran Sara, la “Mudita”, con grandes acciones bajo los palos, pero que no sabe mandar a sus compañeras. Muy al final del partido, sacó una mano a ras de suelo cuando el balón se colaba en su portería, y a resultas de aquel córner, volvió a mandar dentro del área, atajando el balón cuando ni sus compañeras lo esperaban, sin decir aquí estoy yo, pero el caso es que lo estuvo y de qué manera.