Fromago, un gran acontecimiento para que Zamora despierte

Ha tiempo, Rosa Valdeón, cuando era alcaldesa de Zamora, después de una Semana de Pasión, celebró un desayuno de trabajo con la prensa, para tratar de la Semana Santa y sus circunstancias, cómo potenciarla y qué habría que corregir. Recuerdo que un servidor propuso que nuestra ciudad necesitaba cada mes del año un acontecimiento, no religioso, o también, que llenase Zamora de forasteros. Y, por supuesto, todos los fines de semana de cada mes, alguna celebración que resultase atractiva y convocase a gente venida de toda España. Desde entonces, el Ayuntamiento de Guarido lo intentó con un par de acontecimientos, que transformaron la vida ciudadana, que generaron gasto en nuestra ciudad y que todavía recordamos.  Como también mi memoria tiene grabada la Europeade, un espectáculo inolvidable que nos dejó un recuerdo imborrable. Las Edades del Hombre también sirvieron para darnos a conocer. El turismo cultural, desde entonces, fue a más.

Pues hete aquí que Fromago viene a ser, si todo sigue como en esta jornada inaugural, otra Semana Santa, que se celebra en estío, sin olor a velas ni incienso, sin hipocresía y oraciones, sin penitencia ni lamentos; pero con aroma a quesos, los mejores del mundo; con ambiente extraordinario en las avenidas y calles, mientras el dinero corre y la alegría se nota en las actitudes de los comerciantes y restauradores zamoranos. Zamora, como dijo el presidente de la Diputación al final de su discurso, brillante y esclarecedor, ya ha ganado.

Pero jugamos una Liga y hay que jugar más partidos en casa para ser campeones. Los zamoranos, como protagonistas principales; el Ayuntamiento y la Diputación como instituciones esenciales, tenemos aún mucho que hacer, demostrar, dar a los que nos visitan, turistas y empresarios queseros para que Zamora vuelva a celebrar otro Fromago, otra segunda edición.

Yo, como zamorano, no como periodista, exijo a los políticos honradez e ideas. Yo, como amante de Zamora, a la que no pongo cuernos, a la que respeto y quiero, pido a los políticos, a los que están y a los que vendrá a partir de mayo de 2023, que se olviden de sus ideologías, si las tuvieran, que solo piensen en Zamora y los zamoranos, no en nosotros, los que nos vamos despidiendo, los que ya están a punto de entregarse a las exigencias de Cronos; a los jóvenes, a los cuarentones y a los que todavía no nacieron.  Hay que tener memoria de nuestra tierra, pero olvidarse de sus partidos, monstruos que desvían a las personas del camino a la verdad, que las hacen egoístas, que las licencian en felonía.

Unidad política con un solo objetivo: sacar a Zamora del ostracismo, al que nos condenaron los grandes partidos nacionales; evitar la muerte económica de esta provincia, exigir a las administraciones regional y del Estado inversiones y respeto con nuestra gente, porque algunos zamoranos anhelamos morirnos donde nacimos, para seguir viviendo en la misma tierra, cerca del río duradero, del Duero lírico

Requejo puso como ejemplo de unidad política y económica la organización de Fromago. He aquí su reflexión: -Cuando instituciones públicas y empresas privadas vamos de la mano, el fruto es éste:  la mayor feria de calle de queso del mundo; aquí, en nuestra ciudad.  Sus dimensiones, 2 kilómetros de recorrido, y su número de expositores, más de 300, lo avalan”.

Hay que prohibir la envidia entre las organizaciones empresariales y la política. Y apoyar ideas brillantes, las tenga un azul, un rojo o un mediopensionista. Zamora no debe, ni puede, perder a uno solo de sus hijos en una tarea histórica: pensar en grande, trabajar unidos y convertir a esta provincia en nuestra tierra prometida.

Y si el presidente de la Junta de Castilla y León, el ínclito Fernández Mañueco, y el consejero de Agricultura, han intentado, pero no conseguido, hacer de menos a Fromago y los zamoranos, habrá que tenerlo en cuenta en las elecciones de mayo de 2023. Arrieros somos…

Eugenio-Jesús de Ávila