HABLEMOS
Psocialismo de futuro
Desde Zamora
El sanchismo como puro aparato de poder raya el bochorno en sus actuaciones, siquiera desde la gloriosa del cortinón con pucherazo primario del líder que aspira, según dizquean, a pasar a la historia cual héroe de algo, quizá desenterrar la momia de Franco mediando títeres televisivos, verbena progresista/oficialista prime time de la uno… y resto al alimón.
Con todo, no deja de haber personajes dignos de encomio por lo virtuoso, así la ministra a ratos de Hacienda, que tiene a la ciudadanía encandilada con su singular inventico lingüístico, rae del casticismo andalú, al obsequiar a quien se ponga por delante: ¡chiqui! con su gracia, qué digo, gracejo popular y trianero, en el que la ese es ce en el mejor de los casos o bien a la inversa, pues para ello tan enjundiosa y creativa ministra tiene bula heredada de Chaves y el partido de las andanzas consabidas.
Sin embargo, en lo que podría haberse pasado de castizo la sanchista y a lo popular doña Marisú es en salir por tangente y secante con el timo de las pensiones, para chapurrear, borbotear o cecear aquello de que los agüelos cotizantes en la estafa piramidal de la Seguridad Social a lo largo de cuarenta años, lo hicieron con el fin de dar limosna a la progenie, sufragando alquileres, lentejas, dentífrico y pañales para caca de los nenes, o cualquier otra necesidad de la juventud llamada por el moderno psocialismo a mendigar la dádiva del famoso Bienestar, tramoya en la peor tradición peronista y bolivariana, mediante la que condenan sin remedio a las generaciones venideras. Todo a causa de la deuda gigantesca que no deja de crecer bajo un gobierno irresponsable, haciendo de los dineros públicos tejemaneje clientelar en beneficio de la partitocracia como casta institucional y económicamente privilegiada.
¿Topar precios a las grandes superficies? ¡Quia, topar de una vez latisueldos a políticos impresentables, disfrutando bajo máscara y demagogia de lo social de decenas o cientos de miles de euros anuales, más la gabela de indemnizaciones y cotizaciones sociales! Vamos, ciudadano, a votar como manda la sacrosanta democracia en las próximas elecciones, para provecho de oligarquías gozando de prebendas sin cuento. ¡Voto y Bote, español obediente y mansurrón! Fundamentalmente para ti, jubilado cotizante durante décadas, cuya finalidad en la vida pasa según el psocialismo de Sánchez, de doña María Jesús y de la agüela, por subvencionar con una miserable limosna lo que debiera ser futuro honorable para todos. Aunque de momento, cómo no, vuelve el chollo lumpen de las excursiones cada vez menos regaladas del Inserso.
El sanchismo como puro aparato de poder raya el bochorno en sus actuaciones, siquiera desde la gloriosa del cortinón con pucherazo primario del líder que aspira, según dizquean, a pasar a la historia cual héroe de algo, quizá desenterrar la momia de Franco mediando títeres televisivos, verbena progresista/oficialista prime time de la uno… y resto al alimón.
Con todo, no deja de haber personajes dignos de encomio por lo virtuoso, así la ministra a ratos de Hacienda, que tiene a la ciudadanía encandilada con su singular inventico lingüístico, rae del casticismo andalú, al obsequiar a quien se ponga por delante: ¡chiqui! con su gracia, qué digo, gracejo popular y trianero, en el que la ese es ce en el mejor de los casos o bien a la inversa, pues para ello tan enjundiosa y creativa ministra tiene bula heredada de Chaves y el partido de las andanzas consabidas.
Sin embargo, en lo que podría haberse pasado de castizo la sanchista y a lo popular doña Marisú es en salir por tangente y secante con el timo de las pensiones, para chapurrear, borbotear o cecear aquello de que los agüelos cotizantes en la estafa piramidal de la Seguridad Social a lo largo de cuarenta años, lo hicieron con el fin de dar limosna a la progenie, sufragando alquileres, lentejas, dentífrico y pañales para caca de los nenes, o cualquier otra necesidad de la juventud llamada por el moderno psocialismo a mendigar la dádiva del famoso Bienestar, tramoya en la peor tradición peronista y bolivariana, mediante la que condenan sin remedio a las generaciones venideras. Todo a causa de la deuda gigantesca que no deja de crecer bajo un gobierno irresponsable, haciendo de los dineros públicos tejemaneje clientelar en beneficio de la partitocracia como casta institucional y económicamente privilegiada.
¿Topar precios a las grandes superficies? ¡Quia, topar de una vez latisueldos a políticos impresentables, disfrutando bajo máscara y demagogia de lo social de decenas o cientos de miles de euros anuales, más la gabela de indemnizaciones y cotizaciones sociales! Vamos, ciudadano, a votar como manda la sacrosanta democracia en las próximas elecciones, para provecho de oligarquías gozando de prebendas sin cuento. ¡Voto y Bote, español obediente y mansurrón! Fundamentalmente para ti, jubilado cotizante durante décadas, cuya finalidad en la vida pasa según el psocialismo de Sánchez, de doña María Jesús y de la agüela, por subvencionar con una miserable limosna lo que debiera ser futuro honorable para todos. Aunque de momento, cómo no, vuelve el chollo lumpen de las excursiones cada vez menos regaladas del Inserso.
Normas de participación
Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.
La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad
Normas de Participación
Política de privacidad
Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.164