BALBINO LOZANO
Martes, 24 de Diciembre de 2024
NAVIDAD 2024

Tiempo de Adviento

He salido a pasear esta tarde, víspera de la Navidad, y por las calles que frecuento cada día he visto hoy a conocidos que me saludaban con un especial afecto. Además del acostumbrado saludo de "Buenas tardes", añadían  su deseo de "Feliz Navidad", o "Felices Pascuas".  Sin duda,  en su expresión se notaba ese anhelo de que todos seamos felices, de apreciar al amigo, al conocido, al joven y al anciano.


En el trayecto, también pude ver al pobre, aterido de frío, que tendía su mano en demanda de una limosna, junto a él una pancarta en la que se leía: "También acepto alimentos".  Como si la comida fuera un complemento de sus necesidades y lo que prefería era dinero  contante y sonante.   Otro,  quería ayuda para viajar a su tierra y encontrarse con los suyos  al otro  lado de "Tras os Montes", Era portugués.  Ellos, con su presencia  en la calle y sus carteles  comunicando su pobreza, nos invitan a que ejerzamos un acto de caridad, que compartamos algo de lo que nosotros tenemos y a ellos le falta.


En las aceras, se agolpaban las gentes esperando  a que pasara la cabalgata de la Ilusión, querían ver pasar a los personajes que representan la fantasía de los años de la niñez,  saben los papás, las mamás y los abuelitos  que Mickey Mouse, Papá Noel, Bambi, el osito Yogui y Popeye son seres irreales,  pero se los muestran a sus niños como imágenes de la ilusión que siempre nos hicieron soñar con momentos felices. Todos esos personajes que ahora desfilan, a pie o en carrozas, llevan cara sonriente, quieren transmitir a quienes los miran una alegría que debería ser permanente.


En estos días de Adviento, los creyentes y los agnósticos quieren disfrutar de la compañía de los que han estado más o menos alejados, es un buen momento para volver a estar juntos, contarse las novedades ocurridas durante la ausencia y recordar a los que ya no volverán. Todos tenemos que partir algún día para ese viaje sin retorno, pero conviene pararse a meditar que, mientras la vida nos tenga aquí presentes, debemos disfrutar cada instante, en compañía de familiares, amigos y todo ser humano que encontremos en nuestro entorno.  También los hay que disfrutan con la compañía de animales, mascotas a las que miman tanto o más que a sus semejantes.


Para amar no es preciso que llegue el tiempo de Pascuas, pero si este tiempo de la Navidad es un pretexto para que muchos den rienda suelta a sus afectos,  ¡Ojalá que todo el año fuera NAVIDAD!

Balbino Lozano

Comentarios Comentar esta noticia
Comentar esta noticia

Normas de participación

Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.

Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.

La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad

Normas de Participación

Política de privacidad

Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.174

Todavía no hay comentarios

Con tu cuenta registrada

Escribe tu correo y te enviaremos un enlace para que escribas una nueva contraseña.