FÉMINAS
Mujer Vs Mujer
Emilia Casas
En un país en el que setenta mujeres mueren asesinadas por sus parejas cada año, me pregunto qué medidas hubiera tomado cualquier Gobierno si los setenta asesinados al año fueran curas a manos de ateos, o políticos a manos de desahuciados...
Como persona, en especial como mujer; creo que no hay nada más machista que una mujer que es la cruda unión de un feminismo venido a menos, desinformado y panfletizado y de un machismo cada vez más degenerado. Hablo de esa mujer que juzga, ofende, ataca e invisibiliza a otras mujeres sin argumentos, sin criterio y sin posibilidad de diálogo. Si duele que un hombre te insulte y ridiculice por luchar contra una injusticia social flagrante y mundial, todavía duele más si viene por parte de una mujer.
Sabemos que en estos tiempos de difícil colectividad ya no se rastrean luchas en común. El “nosotras también podemos” está más que claro, solucionado y reforzado. Pero para avanzar en “la lucha por la igualdad de derechos” debemos dejar a un lado la actitud inquisitiva y represiva entre nosotras y unirnos para fortalecer espacios de debate, integración y crecimiento de la producción intelectual y cultural de las mujeres para el mundo. Y, por supuesto, sería más que interesante aceptar esa ayuda que, aunque no siempre nos la da el sexo opuesto, nos hace entender que aún existen “personas” comprometidas por el cambio; una lucha común que afecta a toda una sociedad, sin distinción de sexos.
Emma Goldman decía que “Antes de que podamos perdonarnos unos a otros, tenemos que entendernos”; y de eso se trata, de entendernos; pero empezando por uno mismo.
En un país en el que setenta mujeres mueren asesinadas por sus parejas cada año, me pregunto qué medidas hubiera tomado cualquier Gobierno si los setenta asesinados al año fueran curas a manos de ateos, o políticos a manos de desahuciados...
Como persona, en especial como mujer; creo que no hay nada más machista que una mujer que es la cruda unión de un feminismo venido a menos, desinformado y panfletizado y de un machismo cada vez más degenerado. Hablo de esa mujer que juzga, ofende, ataca e invisibiliza a otras mujeres sin argumentos, sin criterio y sin posibilidad de diálogo. Si duele que un hombre te insulte y ridiculice por luchar contra una injusticia social flagrante y mundial, todavía duele más si viene por parte de una mujer.
Sabemos que en estos tiempos de difícil colectividad ya no se rastrean luchas en común. El “nosotras también podemos” está más que claro, solucionado y reforzado. Pero para avanzar en “la lucha por la igualdad de derechos” debemos dejar a un lado la actitud inquisitiva y represiva entre nosotras y unirnos para fortalecer espacios de debate, integración y crecimiento de la producción intelectual y cultural de las mujeres para el mundo. Y, por supuesto, sería más que interesante aceptar esa ayuda que, aunque no siempre nos la da el sexo opuesto, nos hace entender que aún existen “personas” comprometidas por el cambio; una lucha común que afecta a toda una sociedad, sin distinción de sexos.
Emma Goldman decía que “Antes de que podamos perdonarnos unos a otros, tenemos que entendernos”; y de eso se trata, de entendernos; pero empezando por uno mismo.


















Normas de participación
Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.
La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad
Normas de Participación
Política de privacidad
Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.122