El PP de Mañueco y su concepto de la ética

El Partido Popular y Ciudadanos, Mañueco y su gente, Igea y los suyos, iniciaron hoy sus negociaciones para la gobernanza de la Junta de Castilla y León. Sucede este encuentro, un día después de que se conociera ayer que “el responsable de velar por la ética en el PP, denunciado por financiación ilegal de partido en Castilla y León”. Pregunta al lector poco informado: ¿Quién es ese político del que se habla en Diario 16, ese hombre, preñado de virtudes, policía de la moral, custodio de la deontología política en la formación popular? Pues, como expresaría el admirado  y admirable José María García, el ínclito Alfonso Fernández Mañueco, a la sazón candidato a la Presidencia de esa cosa de Valladolid.

¿Y de qué se le acusa? Pues en un escrito, presentado ante la Fiscalía, se le acusa de “delitos de estafa en proceso electoral –disputaba a Silván la Presidencia del PP regional- y financiación ilegal”. ¿Quiénes denuncian? Gente de su cuerda antaño, en 2017; personas del equipo de Fernández Mañueco, cuando era alcalde de Salamanca, según informa Diario 16. Los denunciantes, al parecer, nunca comulgaron con la estrategia del presidenciable a la Junta, basada en exigir a concejales del Ayuntamiento de Salamanca y diputados provinciales de la provincia hermana, más asesores puestos a dedo, 500 euros, en caso de cargos electos, y 300, a los asesores. Estos sucesos acontecieron en 2017, cuando era regidor Mañueco del Ayuntamiento de la capital charra, aspirante a heredar a Herrera. El perjudicado, Silván, que contaba con el apoyo de la ejecutiva de la Junta. Martínez-Maíllo y el PP de Zamora apoyaron, a muerte, sin titubeos, a Fernández Mañueco.

Supongo que Igea, el que manda en Ciudadanos de Castilla y León, conocerá esta información. Si es así, no creo que las negociaciones con el PP deban extenderse en el tiempo. Todo debería resolverse con un apretón de manos protocolario y un adiós, porque no hay nada más que negociar con personajes políticos de este cariz.

La formación naranja, aquí, en Zamora, y en la autonomía aspira a ser la favorita para los ciudadanos de centro y derecha de nuestra tierra. Con este PP de los Mañueco y compañía hay que acabar; porque esta gente no puede estar manejando el dinero público, la pasta de nuestros impuestos. Se necesitan personas honestas, libres, honradas, limpias que representen a un amplio sector social. Ciudadanos hallase ante la oportunidad singular de enterrar a un PP, tomado por personajes sin escrúpulos. Pero si acuerda pactos de gobernanza en Castilla y León con Mañueco, perderá el favor de sus votantes y, lo que sugiero más grave, mantendrá un estilo de hacer política cutre, soez, tabernario y grosero. Igea elige. El pueblo, en virtud de su elección, premiará o castigará a Ciudadanos.