Españolito que vienes al mundo…

Pablo Iglesias, un mal actor político que convence a cierta parte de la clase media alta, ha ejercido hoy de rey Gaspar y de  Pepito Grillo. Los niños, algunos ya talluditos, podrán salir por las aceras de las ciudades con sus patinetes, pelotas y hasta aros, si todavía los infantes conocen este juguete. No fue el ínclito Illa, ministro de Sanidad, el Rajoy catalán, sino el vicepresidente 2º el que entra en escena, que, además, criticó a otros miembros del ejecutivo, del que él  y otras colegas, forma parte, porque no han sabido comunicar.

Tenía para mí que este neocomunista, un Lenin de bolsillo, había llegado a la cúspide de la política merced a su capacidad de comunicación, después de que la inefable Sáenz de Santamaría le concediese protagonismo en las televisiones que controlaba y antes en un canal privado, dominado por el Opus Dei. Si a este Gobierno yerra en la comunicación y ha demostrado suma ignorancia en la gestión, ¡qué puede pensar el español medio, no el hincha o hooligan del PSOE y Unidas Podemos, de estos prodigios que piensan en el cerebro de La Moncloa!

Hay dos datos incontrovertibles  e irrefutables  a los que este ejecutivo, que no sabe comunicar, debería contestar en todas las ruedas de prensa de Pedro Sánchez y sus ministros: ¿Por qué España es el país  del mundo con mayor número de muertos por millón de habitantes? Y, ¿por qué es la nación del orbe con mayor número de sanitarios contagiados? Una puta explicación. ¡Qué nos comunique ese rey Gaspar, amigo de los niños con jardín, por que España ha batido dos marcas tan vergonzosas, hirientes y dolientes! ¿No sabían gestionar, estaban jugando al tute cuando les advirtieron de la gravedad de este virus chino? No se trata de ser de izquierdas o de derechas, sino de tener capacidad intelectual para administrar un Estado, el Gobierno de esta nación. En Portugal, el país hermano, hay un ejecutivo de izquierdas, políticos formales, que han sabido controlar la pandemia, gestionarla.

Quizá en España tengamos la desgracia de padecer la peor izquierda, la más corrupta, por lo que se refiere al PSOE,  del mundo mundial, excepción de Venezuela, Corea del Norte y Cuba, donde todavía la pena de muerte posee vigencia, y la derecha más arcaica y cobarde del orbe. Españolito que vienes al mundo te guarde Dios, porque Pablo Iglesias y Pedro Sánchez uno de los dos, o ambos al unísono,  han de convertir la democracia en una mascarada, en un recuerdo, en una entelequia.

Eugenio-Jesús de Ávila