ESPACIO 36
Ángel Almeida afirma que el arte también es para el verano
Espacio 36 presenta obra de 11 artistas distintos, pero con excelencia, y Ángel Almeida, su director, ya ha preparado otra exposición para el 7 de agosto, con maestros como Antonio Pedrero y San Esteban
Ángel Almeida y su nave de colores Espacio 36 sigue navegando por el mar del arte zamorano. Después del confinamiento, que afectó, como no podría haber sido de otra forma, a la única galería privada de nuestra provincia, el público zamorano, el que ama pintura y escultura, hallará en esta pinacoteca piezas que le encantarán, como las de los once artistas, seis varones y cinco féminas, que exponen sus piezas hasta el próximo 5 de agosto. Almeida ha colgado pinturas de Robles-Musso, Víctor, Ana Zaragozá, José Ángel Marcos, escultor exquisito; Isidoro Moreno, la mexicana Cinabrio Figueroa, Elena Molinaria; Fernando Devesa, la californiana Teresa Brutcher; Javier Aoiz, Carmen Varela y Juan Carlos Matilla. La muestra merece la pena, tanto para inyectar placer en vena como para adquirir y apreciar en el hogar, dulce hogar.
La primera cuestión que le planteo a Almeida responde a los meses de confinamiento y cómo afectó a su galería: “He estado confinado, como todos. Después abrí, con cita previa, a mediados de mayo. Esta es la tercera exposición. Los resultados no son horrorosos, pero tampoco magníficos. Mi afán es seguir y comunicar, y transmitir arte. Esta es la estrategia de mi vida, mi galería. No sabría vivir sin ella”.
Respecto a la exposición, comenta que “la he planteado con seis hombres y cinco mujeres. Zamoranos hay tres: Ana Zaragozá, Matilla y un joven escultor, al que sigo muy de cerca, que se llama José Ángel Marcos, con el que estoy muy contento, porque es un gran tallista y con un proceso creativo muy interesante con la madera. Después he creado una exposición internacional, con tres mujeres, la mexicana Cinabrio Figueroa, una constelación muy mejicana, con colores muy duros; una hiperrealista californiana, Teresa Brutcher, que ya expuso aquí, de forma individual, y una gran artista, profesora de la Facultad de Bellas Artes de la Complutense de Madrid, como es Elena Molinari, de Monteviedo. También hay otra gran artista como Carmen Varela, que acaba de intervenir en el Botánico de Madrid; Matilla, un valor firme; Isidoro Moreno, de Valladolid, un pintor muy interesante; Fernando Devesa, gaditano con raíces zamoranas; Víctor, que es pintor y escultor; Aoiz, con una paleta muy especial, con una sensibilidad exquisita; un hombre de los grandes, un gran descubrimiento mío, como es Robles-Musso, un artista que me vuelve loco con sus reflejos y transparencias. José Ángel Marcos, zamorano, es un tallista muy involucrado con la creación de temas florales, en ébano; Ana Zaragozá, con tres piezas de su última hornada. Estoy muy contento con esta exposición”.
Pero Almeida ya tiene preparada la siguiente exposición: “Inauguraré otra el 7 de agosto, con obras de Antonio Pedrero, San Esteban, Cuasante, Limia, López Herrera, Paco Segovia, Reche, Cuñado, Norberto, Daniel Parra, y los escultores Javier y Pedro Roales. Gente de calado nacional. Casi todos presentan sus últimas obras. De Pedrero, colgaré del año 1975, una obra espectacular. Temas vinculados con Zamora, con mucho protagonismo de la ciudad. Será la exposición Fondo de Arte”.
Podría ser un buen momento para invertir en pintura: “Creo que el arte siempre ha sido un valor refugio. El oro, las antigüedades, el arte son valores tangibles, más sin son firmas consolidadas. Si alguien invierte en una obra, que podría valer un poco menos, porque el artista tiende ahora a la baja, dado que el mundo está como está, el día de mañana tendrá un valor superior. En malos momentos, el arte resurge. La gente que tiene posibilidades sabe que es una inversión. Y, además, hay que valorar esa pieza, su posesión, tenerla. Eso influye mucho. Por lo demás, te digo que voy a renovar el contrato de alquiler. Me voy a meter en arenas movedizas. No sé lo que va a pasar. No me da miedo. Quiero continuar y promover cosas de arte muy interesantes. De momento, no me dejan jubilarme. Quizá aporte algo a la sociedad”. Almeida se expresa de tal manera con una amplia sonrisa.
Ángel Almeida y su nave de colores Espacio 36 sigue navegando por el mar del arte zamorano. Después del confinamiento, que afectó, como no podría haber sido de otra forma, a la única galería privada de nuestra provincia, el público zamorano, el que ama pintura y escultura, hallará en esta pinacoteca piezas que le encantarán, como las de los once artistas, seis varones y cinco féminas, que exponen sus piezas hasta el próximo 5 de agosto. Almeida ha colgado pinturas de Robles-Musso, Víctor, Ana Zaragozá, José Ángel Marcos, escultor exquisito; Isidoro Moreno, la mexicana Cinabrio Figueroa, Elena Molinaria; Fernando Devesa, la californiana Teresa Brutcher; Javier Aoiz, Carmen Varela y Juan Carlos Matilla. La muestra merece la pena, tanto para inyectar placer en vena como para adquirir y apreciar en el hogar, dulce hogar.
La primera cuestión que le planteo a Almeida responde a los meses de confinamiento y cómo afectó a su galería: “He estado confinado, como todos. Después abrí, con cita previa, a mediados de mayo. Esta es la tercera exposición. Los resultados no son horrorosos, pero tampoco magníficos. Mi afán es seguir y comunicar, y transmitir arte. Esta es la estrategia de mi vida, mi galería. No sabría vivir sin ella”.
Respecto a la exposición, comenta que “la he planteado con seis hombres y cinco mujeres. Zamoranos hay tres: Ana Zaragozá, Matilla y un joven escultor, al que sigo muy de cerca, que se llama José Ángel Marcos, con el que estoy muy contento, porque es un gran tallista y con un proceso creativo muy interesante con la madera. Después he creado una exposición internacional, con tres mujeres, la mexicana Cinabrio Figueroa, una constelación muy mejicana, con colores muy duros; una hiperrealista californiana, Teresa Brutcher, que ya expuso aquí, de forma individual, y una gran artista, profesora de la Facultad de Bellas Artes de la Complutense de Madrid, como es Elena Molinari, de Monteviedo. También hay otra gran artista como Carmen Varela, que acaba de intervenir en el Botánico de Madrid; Matilla, un valor firme; Isidoro Moreno, de Valladolid, un pintor muy interesante; Fernando Devesa, gaditano con raíces zamoranas; Víctor, que es pintor y escultor; Aoiz, con una paleta muy especial, con una sensibilidad exquisita; un hombre de los grandes, un gran descubrimiento mío, como es Robles-Musso, un artista que me vuelve loco con sus reflejos y transparencias. José Ángel Marcos, zamorano, es un tallista muy involucrado con la creación de temas florales, en ébano; Ana Zaragozá, con tres piezas de su última hornada. Estoy muy contento con esta exposición”.
Pero Almeida ya tiene preparada la siguiente exposición: “Inauguraré otra el 7 de agosto, con obras de Antonio Pedrero, San Esteban, Cuasante, Limia, López Herrera, Paco Segovia, Reche, Cuñado, Norberto, Daniel Parra, y los escultores Javier y Pedro Roales. Gente de calado nacional. Casi todos presentan sus últimas obras. De Pedrero, colgaré del año 1975, una obra espectacular. Temas vinculados con Zamora, con mucho protagonismo de la ciudad. Será la exposición Fondo de Arte”.
Podría ser un buen momento para invertir en pintura: “Creo que el arte siempre ha sido un valor refugio. El oro, las antigüedades, el arte son valores tangibles, más sin son firmas consolidadas. Si alguien invierte en una obra, que podría valer un poco menos, porque el artista tiende ahora a la baja, dado que el mundo está como está, el día de mañana tendrá un valor superior. En malos momentos, el arte resurge. La gente que tiene posibilidades sabe que es una inversión. Y, además, hay que valorar esa pieza, su posesión, tenerla. Eso influye mucho. Por lo demás, te digo que voy a renovar el contrato de alquiler. Me voy a meter en arenas movedizas. No sé lo que va a pasar. No me da miedo. Quiero continuar y promover cosas de arte muy interesantes. De momento, no me dejan jubilarme. Quizá aporte algo a la sociedad”. Almeida se expresa de tal manera con una amplia sonrisa.
Normas de participación
Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.
La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad
Normas de Participación
Política de privacidad
Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.17