Nélida L. Del Estal Sastre
Miércoles, 26 de Agosto de 2020
CON LOS CINCO SENTIDOS

Bajo en calorías

[Img #43014]Vas al súper, toda pancha y ancha a por chocolate o a una tienda “delicatessen” sin medir nada. Porque hoy es hoy y te lo has ganado, tal y como rezaba el famoso anuncio de bombones de una conocida marca. Eres lo más en ese momento y te sientes poderosa y con ganas de pecar. De repente, ¡oh sí!, ante ti se presenta una estantería repleta de productos bajos en grasas, bajos en calorías, bajos de moral y con fotografías de cuerpos que parecen haber sido esculpidos por un dios, como si comiendo ese alpiste asqueroso que no sabe a nada más que a pienso compuesto se te fuera a quedar un cuerpo de Adonis o Afrodita de la leche. ¡Venga Ya! Nos quejamos de las dictaduras que han atenazado y atenazan nuestra historia antigua y reciente y no nos damos cuenta de que la verdadera dictadura la tenemos delante de nuestros ojos. Hombres y mujeres, delante del televisor, en las redes sociales y en la piscina o la playa.

A ver, una cosita, así, de primeras. Tomar el sol a lo bestia como si fueras un solomillo vuelta y vuelta a la parrilla, sudando, pasando “las de Caín”, no está bien, provoca melanomas. Yo ya lo aprendí y voy por la vida luciendo un magnífico blanco nuclear, muy a la japonesa. Cultura que admiro, por otra parte. Me desvío del tema. Mi moreno “merluza del Cantábrico” tampoco está tan mal. Para eso ya está mi pelo, morenito desde que nací. Compenso con ello.

Estos ojos han visto jamón bajo en calorías, margarina que podría servir de carburante para motores de combustión, vino sin alcohol (¿??????), yogures con más bacterias que un baño público y todo por el bienestar de tu intestino, barritas energéticas que aportan tan pocas calorías que eso de “energéticas” debe de ser un eufemismo o, directamente, una coña marinera. Te comes una y como hagas diez minutos de bici estática o spinning, te mareas de manera inexorable. La lipotimia está asegurada, sin que tenga que ir un señor Notario a dar fe del asunto. Estamos muy tontos.

Quiero jamón de bellota, vino tinto o blanco auténtico, solomillos vuelta y vuelta para degustarlos y comida que sepa a comida de verdad. La vida son cuatro días y dos te los pasas durmiendo. ¿Hace falta un argumento mejor para aprovechar lo que la naturaleza nos ofrece? Creo que no. Levantemos armas en contra de la dictadura absurda de pasar hambre y penurias cuando tenemos la mejor dieta del mundo, los mejores productos y la mejor gente para compartirlos. ¡Que viva el jamón! He dicho. Me ha entrado apetito escribiendo esto. Bocata de jamón al canto.

Nélida L. del Estal Sastre

Comentarios Comentar esta noticia
Comentar esta noticia

Normas de participación

Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.

Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.

La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad

Normas de Participación

Política de privacidad

Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.149

Todavía no hay comentarios

Con tu cuenta registrada

Escribe tu correo y te enviaremos un enlace para que escribas una nueva contraseña.