El Guernica, duro hueso de roer para el Quesos el Pastor

El partido, adelantado a 6 de la tarde, vuelve a tener el hándicap para las anfitrionas, de no contar con el aliento de su público.

El Guernica es del primer grupo. Ya en el partido de ida, las vizcaínas se impusieron 88-55, haciéndolo claramente, según las crónicas de entonces. Ahora, el Zamarat es un equipo distinto o debiera de serlo a tenor de los cambios en su plantilla, pero aunque la mejora es evidente y las de Fran García afinan más, no acaban de dar ese paso firme y palmario que demuestre el movimiento andando.

Con Okonkwo lesionada y las escasas rotaciones en algunas jugadoras debido a la corta plantilla, Fran García debe encomendarse a lo que tiene, con la revalorizada Gidden viviendo su segunda juventud, la constancia de Lizarazu y las demás cualidades de cada una, habrá que ponerse ahora en manos de la última adquisición, Victoria Vivians y confiar que su muñeca, desde fuera y dentro de los 6,25, sea prodigiosa y ponga al equipo en la órbita de una nueva victoria.

Como decíamos al principio, ha causado sorpresa para el cuerpo técnico de que Okonkwo haya sido convocada por su país, Nigeria, y tenga que desplazarse este domingo a Atlanta, algo que Fran García no entiende y es de la opinión de que debiera haberse presentado el correspondiente informe médico para impedir su marcha.

 Por otra parte, Policari, que había sentido unas molestias durante la semana, podrá jugar si Fran García lo cree conveniente. El entrenador asturiano cree que la salvación está a 4 victorias: “En esos números nos manejamos.

“El Guernica está detrás de ese grupito que hay después de Salamanca, Gerona y Valencia, Entonces, sabemos la dificultad del rival, además de las dificultades que tenemos, pero hay que olvidarse de todo y salir a competir, saber que cada partido es una final y estar centrados los 40 minutos”, en palabras de Fran García.