HABLANDO CLARO
IU: el único partido auténtico de izquierdas que es zamorano
![[Img #49138]](https://eldiadezamora.es/upload/images/02_2021/3275_servidor-4.jpg)
Lo sabía. Lo he escrito. Hoy lo confirmo: Izquierda Unida es la única formación política de izquierdas que es de Zamora. Así de tajante, de claro. Se me objetará que también existen el PSOE y Unidas Podemos. En absoluto, porque esos dos partidos solo obedecen órdenes de sus jefes, radicados en Madrid o, en su defecto, en el caso socialista, de Valladolid.
La Asamblea Provincial de IU Zamora, celebrada ayer, eligió la libertad, la soberanía, su autonomía. Guarido, Viñas y demás personalidades son la antítesis de gente como Garzón, burguesito andaluz, de familia bien, que vendió un partido ejemplar, el partido de gente como el minero Iglesias, el inolvidable Julio Anguita, el laborioso y auténtico Cayo Lara, sin olvidarme de Frutos, que acompañó a aquel en una visita a nuestra ciudad, durante la fiesta de IU Zamora. Ahora, los diputados de IU en el Congreso obedecen órdenes de Podemos, la izquierda anacrónica, la izquierda imposible, la izquierda de salón, la izquierda teatral e hiperbólica.
Zamora necesita partidos zamoranos, a derecha y a izquierda. Guarido es zamorano y de izquierdas. El alcalde quiere a su ciudad. Se lo podrá criticar desde la diestra y la otra izquierda. Sus razones tendrán. Pero el regidor no recibe órdenes de Madrid, no se inclina ante el jerarca, no se humilla. No se esconde cuando critica, con sutileza, con finura, a los izquierdistas madrileños. Quizá le cueste el olvido del Gobierno para inversiones en nuestra ciudad. Pero tiene personalidad. La aldea zamorana no se rendirá a la izquierda imperialista que Gobierna España.
Pero si la izquierda zamorana ya tiene su partido, la derecha, no. El PP, que vive una guerra, solapada, silente, interna, donde los de siempre se quieren cargar al de ahora, Barrios, que también fue de antes, nunca mostrará personalidad para defender a nuestra ciudad y provincia sin recibir el plácet de Casado en Madrid, a su vez, contestado por Mañueco en Valladolid. Ciudadanos de Zamora, aunque Francisco J. Requejo realice una magnífica labor en la Diputación Provincial; Cruz Lucas ande en sus labores de oposición en el Ayuntamiento de la capital y Mayte Gago trabaje bien en las Cortes de Castilla y León, dejará de existir en estos pagos y presiento que también quedará como partido residual en el resto de España, émulo político de la UPyD.
Por lo tanto, Zamora, ciudad y provincia, necesita una formación interclasista, política en el término más hermoso, pero nunca jamás con una deriva hacia el profesionalismo de sus dirigentes. Este partido debería, por supuesto, colaborar con la única izquierda zamorana, la de IU, para defender en los parlamentos autonómico y nacional, Cortes de Castilla y León, Congreso de los Diputados y Senado, nuestros intereses.
La historia nos ha demostrado que los partidos nacionales, en esencia, PSOE, el que más gobernó nuestra patria, y PP, el que más mandó, y de qué manera, en esta autonomía ahistórica, y Diputación Provincial, pasaron de nosotros. Con el felipismo, se inició nuestra decadencia económica y demográfica, cuando el Estado comenzó una serie de desinversiones en la ciudad y la provincia, causando un enorme daño económico, todavía sin evaluarse, en nuestra tierra. El PP no hizo otra cosa que seguidismo.
Y las infraestructuras construidas llegaron tarde, demasiado tarde, cuando casi no había remedio, y porque los ejecutivos de Madrid necesitaban construirlas para unir territorios, como el AVE a Galicia. Pero los tramos de las autovías entre Zamora y Tordesillas y Zamora y Benavente fueron los últimos en realizarse. De hecho, ahí está, sin definirse, la Zamora-frontera lusa. Desde que gobernó ZP, cuando el PP inició sus reclamaciones sobre esa infraestructura, más que necesaria para nuestra tierra, porque nuestro futuro se halla en Portugal, hasta este Gobierno de Sánchez, ambas formaciones se vienen acusando de inacción respecto a esa autovía.
IU Zamora necesita tener parlamentarios propios en Madrid y Valladolid. Convencido estoy de que una candidatura que encabezase Francisco Guarido a las próximas elecciones legislativas triunfaría. Mientras, la ciudadanía zamorana más preclara, viva, concienciada tendría que iniciar una serie de menesteres para concretarse en un partido zamorano, una especie de ADEIZA, pero que se nutriese de intelectuales, empresarios, autónomos, más agricultores y ganaderos; personas de edad y jóvenes; gente con trabajo y parados. No nos queda mucho tiempo. De momento, Zamora sí tiene, sin tutelas, sin vicarios foráneos, sin pleitesías, un partido de izquierdas: IU.
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Lo sabía. Lo he escrito. Hoy lo confirmo: Izquierda Unida es la única formación política de izquierdas que es de Zamora. Así de tajante, de claro. Se me objetará que también existen el PSOE y Unidas Podemos. En absoluto, porque esos dos partidos solo obedecen órdenes de sus jefes, radicados en Madrid o, en su defecto, en el caso socialista, de Valladolid.
La Asamblea Provincial de IU Zamora, celebrada ayer, eligió la libertad, la soberanía, su autonomía. Guarido, Viñas y demás personalidades son la antítesis de gente como Garzón, burguesito andaluz, de familia bien, que vendió un partido ejemplar, el partido de gente como el minero Iglesias, el inolvidable Julio Anguita, el laborioso y auténtico Cayo Lara, sin olvidarme de Frutos, que acompañó a aquel en una visita a nuestra ciudad, durante la fiesta de IU Zamora. Ahora, los diputados de IU en el Congreso obedecen órdenes de Podemos, la izquierda anacrónica, la izquierda imposible, la izquierda de salón, la izquierda teatral e hiperbólica.
Zamora necesita partidos zamoranos, a derecha y a izquierda. Guarido es zamorano y de izquierdas. El alcalde quiere a su ciudad. Se lo podrá criticar desde la diestra y la otra izquierda. Sus razones tendrán. Pero el regidor no recibe órdenes de Madrid, no se inclina ante el jerarca, no se humilla. No se esconde cuando critica, con sutileza, con finura, a los izquierdistas madrileños. Quizá le cueste el olvido del Gobierno para inversiones en nuestra ciudad. Pero tiene personalidad. La aldea zamorana no se rendirá a la izquierda imperialista que Gobierna España.
Pero si la izquierda zamorana ya tiene su partido, la derecha, no. El PP, que vive una guerra, solapada, silente, interna, donde los de siempre se quieren cargar al de ahora, Barrios, que también fue de antes, nunca mostrará personalidad para defender a nuestra ciudad y provincia sin recibir el plácet de Casado en Madrid, a su vez, contestado por Mañueco en Valladolid. Ciudadanos de Zamora, aunque Francisco J. Requejo realice una magnífica labor en la Diputación Provincial; Cruz Lucas ande en sus labores de oposición en el Ayuntamiento de la capital y Mayte Gago trabaje bien en las Cortes de Castilla y León, dejará de existir en estos pagos y presiento que también quedará como partido residual en el resto de España, émulo político de la UPyD.
Por lo tanto, Zamora, ciudad y provincia, necesita una formación interclasista, política en el término más hermoso, pero nunca jamás con una deriva hacia el profesionalismo de sus dirigentes. Este partido debería, por supuesto, colaborar con la única izquierda zamorana, la de IU, para defender en los parlamentos autonómico y nacional, Cortes de Castilla y León, Congreso de los Diputados y Senado, nuestros intereses.
La historia nos ha demostrado que los partidos nacionales, en esencia, PSOE, el que más gobernó nuestra patria, y PP, el que más mandó, y de qué manera, en esta autonomía ahistórica, y Diputación Provincial, pasaron de nosotros. Con el felipismo, se inició nuestra decadencia económica y demográfica, cuando el Estado comenzó una serie de desinversiones en la ciudad y la provincia, causando un enorme daño económico, todavía sin evaluarse, en nuestra tierra. El PP no hizo otra cosa que seguidismo.
Y las infraestructuras construidas llegaron tarde, demasiado tarde, cuando casi no había remedio, y porque los ejecutivos de Madrid necesitaban construirlas para unir territorios, como el AVE a Galicia. Pero los tramos de las autovías entre Zamora y Tordesillas y Zamora y Benavente fueron los últimos en realizarse. De hecho, ahí está, sin definirse, la Zamora-frontera lusa. Desde que gobernó ZP, cuando el PP inició sus reclamaciones sobre esa infraestructura, más que necesaria para nuestra tierra, porque nuestro futuro se halla en Portugal, hasta este Gobierno de Sánchez, ambas formaciones se vienen acusando de inacción respecto a esa autovía.
IU Zamora necesita tener parlamentarios propios en Madrid y Valladolid. Convencido estoy de que una candidatura que encabezase Francisco Guarido a las próximas elecciones legislativas triunfaría. Mientras, la ciudadanía zamorana más preclara, viva, concienciada tendría que iniciar una serie de menesteres para concretarse en un partido zamorano, una especie de ADEIZA, pero que se nutriese de intelectuales, empresarios, autónomos, más agricultores y ganaderos; personas de edad y jóvenes; gente con trabajo y parados. No nos queda mucho tiempo. De momento, Zamora sí tiene, sin tutelas, sin vicarios foráneos, sin pleitesías, un partido de izquierdas: IU.





























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