Aceras de Candelaria:mal, muy mal y... lo siguiente

Perdimos un grupo, interesado en los problemas de Zamora, siendo oposición, y con ello no ganamos un gobierno municipal que resolviera, parte de lo que antes denunciaba. Aquel qué contaba hasta el número de baldosas rotas, de la noche a la mañana, parece que ahora no ve ninguna en mal estado. Como solas no se arreglan, solo queda aguantar y esperar que no empeoren excesivamente. La reparación parece que tardará. Hay quien opina, que ni siquiera llegará, viendo como siguen igual pasando los años y sin que se haga absolutamente nada. Estamos, o tendremos que acostumbrarnos.

                Es la tónica general de las calles de la ciudad, solo hay que pasear por el centro para comprobarlo. Pero por los barrios también se anda, hay actividad comercial, escasa, siempre menor de la deseada,  la gente se desplaza de un sitio a otro. Tal es el caso de Candelaria Ruiz del Árbol, que no solo es la arteria principal del barrio, además conecta la Aldehuela con la avenida de Portugal y San Pablo. El estado de sus aceras es lamentable, en general, pero en algunos tramos adquiere dimensiones mayores. No solo hay baldosas sueltas y rotas, son grupos de ellas hundidas y levantadas, favoreciendo la situación más propicia para tropezar, el único modo de evitarlo es caminar mirando al suelo y no despistarse mucho. En  algún punto los vecinos se han visto obligados a recolocarlas como han podido, para evitar que se pierdan directamente. Evidentemente, el resultado no es el más satisfactorio, pero siempre mejor, que sea el hueco, en el que choque el pie continuamente.

                Puede que las raíces de los arboles sean los causantes de que el pavimento esté levantado. Sí, eso parece en algún tramo, pero también es cierto que, en las zonas donde no hay nada plantado, el pavimento está igual de mal, en años no han sido capaces de reponer ni una triste baldosa. Ahora ya no valen los parches, porque hay más zonas necesitadas de arreglos que las que se encuentran en un estado medianamente aceptable. Motivo por el cual conviene realizar un plan integral que comprenda la retirada total, para sobre un mortero adecuado, colocar las baldosas nuevamente, Nos da igual el color, no es lo más importante.

Manuel Herrero Alonso