Ricardo Prieto, violonchelista: “El apoyo a la cultura es esencial, no solo algo económico”

Ricardo Prieto Ganado, protagonista de esta entrevista, es un joven violonchelista zamorano, que concluyó su carrera en el Conservatorio Superior de Música de Salamanca en este siglo XXI, obteniendo matrícula de Honor y Premio Extraordinario Fin de Carrera. Amplió sus estudios en Holanda, con la profesora Timora Rosler. Durante su formación, ha recibido cursos de perfeccionacionamiento y masterclass de la mano de profesores como Steven Isserlis, Dmitry Ferschtman, Marçal Cervera, Gavriel Lipkind, Tatiana Vasilieva, Iagoba Fanlo, Paul Friedhoff, Marc Coppey y Mihal Dmochowsky.

-¿Cualquier persona está capacitada para ser músico? Te lo pregunto porque conozco gente que quiso seguir enseñanzas en Conservatorios a los que se les respondió que carecían de oído.

-Creo que, como en cualquier disciplina, por muy complicada que resulte, se puede tener un mayor o menor nivel. En los estudios musicales, te encuentras con compañeros con un oído fantástico y con otros que no tanto. Al final, el oído se entrena, como todo en esta vida. Cualquier persona puede llegar a hacer música claro que sí, otra cosa es que el talento o la dedicación le permita llegar a dedicarse a ello profesionalmente.

-¿Se hereda también el talento musical? Sé que tu abuela materna es profesora de piano.

-Desconozco si existe algún estudio científico que determine si el talento musical puede heredarse, lo que está claro es que el crecer en un ambiente donde se respire música de la forma que sea ayuda bastante. Yo he tenido la suerte de poder convivir con mi abuela, que ha sido profesora de piano del Conservatorio de Zamora durante muchos años, y eso me ayudó mucho en mis estudios.

-¿A qué edad decidiste que la música sería tu profesión?

-Con dieciséis años más o menos, cuando en el instituto se te empiezan a plantear posibles salidas universitarias y hablas con tus compañeros del futuro. Recuerdo llegar a casa y decirle a mi madre: “Mamá, ¿ y si estudio derecho? ¿o bellas artes? “ Obviamente me dijo que aprovechara los años en el conservatorio y que siguiera adelante. Es muy importante ese empujoncito que te pueden dar tus padres, ya que son unos años en los que mucha gente decide no continuar hacia el grado superior.

-¿Por qué elegiste un instrumendo como el violoncello?

-No tengo el recuerdo de elegir yo mismo el violonchelo por algo en especial, creo que mi abuela, al trabajar en el Conservatorio, sabía que el profesor de chelo merecía la pena, al final es muy importante en los primeros años tener una buena base. Fue una buena decisión, un instrumento maravilloso.

-¿Cuántos instrumentos tocas?

-Profesionalmente solo el violonchelo, aunque en el conservatorio aprendes piano como asignatura complementaria durante bastantes años. También toco un poquito la guitarra, pero cuatro acordes para cantar un poquito y divertirme.

-¿Qué importancia tiene este instrumento en una orquesta sinfónica?

-Los violonchelos, junto a los contrabajos, somos la base armónica de la orquesta, no puede haber tejado sin unos buenos cimientos. El chelo, además, es un instrumento con un carácter muy melódico, por lo tanto, adquiere de forma bastante habitual un papel protagonista en el repertorio sinfónico.

-Envidio a músicos nacidos en la Europa del Este, porque parece que todos saben música, tocar diversos instrumentos y su inmensa cultura musical. ¿España es una cenicienta en música clásica?

-Es cierto que, en España, hay mucha menos tradición musical, si nos comparamos con Alemania, por ejemplo. Pero creo que, en los últimos veinte años, el nivel de los músicos españoles ha subido considerablemente, cada vez hay más gente, más competencia y más jóvenes que salen a formarse. Hay trabajo por hacer, para ello es muy importante la educación desde pequeñitos, en eso otros países nos sacan gran ventaja.

-¿Un músico de tu calidad y a tu edad sigue formándose?

-Los músicos siempre están formándose y mejorando. De alguna forma, hay que mantenerse activo y no dejar de estudiar y de aprender. Cada semana en la orquesta es diferente y aprendes cosas nuevas con solistas o directores que vienen de distintas partes del mundo.

-¿Las orquestas nacionales, como en las que tú has tocado, tienen algo que envidiar a las grandes orquestas alemanas, checas, austriacas…?

-En España, tenemos grandes orquestas y cada vez más nivel dentro de las mismas. Obviament,e las agrupaciones más famosas y de mayor calidad las encontramos por ejemplo en Alemania, claro, juegan con la ventaja de una enorme tradición y un gran apoyo socioeconómico.

-¿Qué pueden hacer las instituciones públicas para fomentar la música en nuestra tierra?

-Creo que la educación de las nuevas generaciones es lo más importante, no solo en los colegios, es necesario revalorizar nuestra cultura, creo que se puede mejorar en los contenidos que se ofrecen, tanto en televisión como en radio, en prensa también. Los jóvenes tendrían que ser capaces de discernir entre contenidos de calidad y material perfectamente desechable. El apoyo a la cultura debería de ser algo esencial, no solo en lo económico. Se tiene que dar más visibilidad e importancia a todo tipo de espectáculos culturales.