Penúltima protesta contra la Junta de los partidarios de la Biorrefinería de Barcial

Unas 300 personas, entre las que se encontraban representantes de partidos políticos como Izquierda Unida, UPL, Ahora Decide, Tercera Edad en Acción, Podemos y PREPAL,  más el la UCCL, acudieron esta tarde a la llama de la Plataforma Biorrefinería de Barcial del Barco, convocada frente a la Delegación de la Junta de Castilla y León, para decirle al ejecutivo autonómico que esta tierra, Zamora y León, tiene necesidad de esta industria, que no ponga más obstáculos a la instalación de empresas y de que dé el mismo trato a estas provincias que a las restantes de la comunidad. Ni PSOE, Ni PP, ni Ciudadanos, ni Vox apoyaron la manifestación. Tampoco se personó Francisco J. Requejo, presidente de la Diputación y político clave en la adquisición de los terrenos de Barcial en los que se construiría la factoría que produjese bioetanol, obtenido del maíz y la remolacha.

Quienes si estuvieron fueron los Merino, padre e hijo, abogado de la empresa y amigos llegados de León.

Emiliano Fernández abrió  el turno de oradores, para ceder el testigo a Manuel Fuentes, encargado de leer el manifiesto oficial, en el que se reflejaba la cronología de la extorsión, realizada a un proyecto, a un emprendedor, a las provincias de  Zamora y León y a una comunidad autónoma.  Fuentes también tiró de la Carta Magna en su discurso y pidió al presidente de la Junta, Fernández Mañueco, que “solucione, de forma inmediata y contundente este problema”.  

“En primer lugar, buenas tardes a todos y muchas gracias por participar en esta concentración, a la puerta de la sede de la Junta de Castilla y León para pedir una atención especial con esta tierra que tiene los mismos derechos que Valladolid o Burgos a tener servicios, infraestructuras y empresas que garanticen un nivel de vida digno a sus ciudadanos”.

“El Art. 130 de la Constitución Española dice: Los poderes públicos atenderán a la modernización y desarrollo de todos los sectores económicos y, en particular, de la agricultura y de la ganadería a fin de equiparar el nivel de vida de todos los españoles”.

                “Es la enésima vez que nos concentramos en apoyo del proyecto de  biorrefinería multifuncional  de  Barcial  del Barco”.

“El Art. 16 del Estatuto de Autonomía de Castilla y León incluye 25 principios rectores de las políticas públicas, entre ellos se incluye el garantizar el crecimiento económico sostenible orientado a la cohesión social y territorial y a la potenciación y aprovechamiento pleno de los recursos de la Comunidad para mejorar la calidad de vida. Tenemos los mejores remolacheros del mundo y especialistas muy cualificados en la producción de maíz. Incluye como principio rector de las políticas el desarrollo de todas las formas de actividad empresarial, no sólo de las de los amigos. Incluye el ejercicio efectivo del derecho de los ciudadanos a vivir y trabajar en su propia tierra, incluye la lucha contra la despoblación, la modernización y el desarrollo integral de las zonas rurales, dotándolas de infraestructuras y servicios públicos suficientes, incluye el apoyo decidido a los sectores agrícola, ganadero y agroalimentario de la Comunidad mediante el desarrollo tecnológico y biotecnológico, con el fin de mejorar la competitividad der los mismos”.

“¿Os suenan de algo estos principios?, ¿ No os recuerdan a este proyecto, que los cumple todos?, ¿Se habrá leído el gobierno de esta Comunidad los principios rectores que ellos mismos han aprobado? Y, lo que es más grave; ¿Son conscientes que no cumplen ni uno sólo de sus principios rectores estas provincias?”    

“Esta Plataforma Pro-Biorrefinería a lo largo de esta última década siempre dijo que estaríamos vigilantes ante las conductas presuntamente delictivas que a lo largo de todo el proceso pudieran estar llevando a cabo  grupos organizados dentro de la administración,  empresas y  otros entes que han estado boicoteando este proyecto desde hace 15 años”.

“Y cuando ya el proyecto parecía que había superado todas las dificultades, cuando las máquinas estaban trabajando en una primera fase de construcción de la biorrefinería, cuando estábamos a punto de conseguir la cesión de los terrenos por parte de la Diputación Provincial a los promotores; éstos deciden paralizar las obras hasta tanto no se solucionen los gravísimos problemas que se están produciendo  y de los que tienen  pruebas  aportadas por  empresas con las que han estado negociando una  inversión millonaria en el proyecto. En estas pruebas  se evidencia el  presunto  chantaje y presunta  extorsión  que determinadas consejerías y grupos de personas  de la JCYL, han ejercido en el pasado y ejercen en el presente sobre las empresas que quieren invertir  en el   proyecto. Los que tendrían que ser quienes más lo apoyaran son los que ponen zancadillas permanentes en el mismo”.

Y llegó el momento de hablar de posibles corrupciones: “Estamos aquí hoy para informaros  de la presunta extorsión  que desde hace quince años viene realizando la JCYL  Durante los quince años  de vida del proyecto,  la consigna marcada a fuego por los dirigentes de la Junta a todos sus  los portavoces,  cuando han tenido que hablar  del proyecto de  biorrefinería de Barcial ha sido:  El proyecto de biorrefinería de Barcial del Barco tiene problemas de financiación”.

“Esta afirmación no es cierta. La realidad  que rodea al proyecto de Biorrefinería Multifuncional es que este proyecto es tan innovador, tan disruptivo con los modelos del sector primario hasta ahora existentes, tan rentable, tan transformador de la agricultura, de la ganadería, de la industria,  de los  biocombustibles, tan generador de riqueza que siempre ha tenido  empresas multinacionales  decididas a   participar en el accionariado y en la construcción de la misma”.

“Esta realidad, que la JCYL ha intentado ocultar durante 15 años, provocó desde su inicio una alarma en las empresas de la comunidad  con un modelo productivo ya obsoleto, no rentables,  pero que saben muy bien qué hacer  para estar totalmente  protegidas  y blindadas por la  JCYL, impidiendo que  nuevos modelos productivos agroindustriales puedan arruinar lo que parece ser un presunto  negocio para ambos”.

“Por un problema de tiempo y cuestiones legales, no podemos detallar  los nombres de las  empresas multinacionales españolas que desde hace 15 años han decidido hasta el día de hoy   invertir en el proyecto”.

E informó de asuntos que desconoce el ciudadano: “Lo que sí tenéis que saber es que varias empresas multinacionales, de las más relevantes de España, con experiencia y capacidad tecnológica  en este tipo  desarrollos industriales  han querido hacer inversiones millonarias en el Proyecto de Biorrefinería  Multinacional de Barcial de Barco”.

¿Razones para no invertir? Las explicó también el ordador: “Los motivos que llevan a estas empresas multinacionales a querer invertir  en este proyecto, por resumir la opinión de todas ellas, es que este proyecto es único en Europa;  es innovador pero sin riesgo tecnológico (cuenta con avales técnicos), es rentable y está en línea con las directrices de la UE, motivo por el cual y máxime hoy en día, podría contar con un % importante de financiación a través de los fondos europeos de recuperación.  Se han presentado, junto con una de estas multinacionales, las manifestaciones de interés solicitando dichos fondos para este proyecto”.

Y se había algo que denunciar, también se escuchó: “Lo que queremos denunciar  es  que a pesar de las virtudes del proyecto descrito por estas empresas, cuando una por una a lo largo de estos  quince años se han reunido con  distintos responsables de la JCYL, todas ellas han desistido de la inversión que ya tenían decidida.  Las razones que han dado son que la JCYL les ha confirmado que tanto en el pasado como en el momento actual hay grupos de dirigentes dentro de la JCYL que se han opuesto y se van a seguir oponiendo al proyecto. En estas reuniones La JCYL les  han dejado claro a estas empresas multinacionales que no quieren que estén como inversores en el proyecto de Biorrefinería,  y que de persistir en el deseo de invertir en el proyecto habría consecuencias. Lo más grave ha ocurrido el pasado mes de noviembre cuando a una multinacional que quería ser el inversor tractor del proyecto se le comunica que la Junta no quiere que formen parte del mismo ni como accionista, ni como promotor o otras inversiones multimillonarias con las que cuentan en la CA (eólicas y solares principalmente) correrían  peligro. Algún directivo de estas empresas  ha llegado a   afirmar literalmente “El sabotaje que te hacen  es lo suficientemente fino-light- como para que encima no puedas decir nada”.    

A los potenciales inversores les gusta el proyecto: “Todas las empresas coincidieron  en manifestar que no pueden entender cómo un proyecto tan importante e innovador, que por sí solo puede cambiar el desarrollo social, agro-industrial  y económico de la CA es  rechazado de manera tan rotunda por dirigentes de la  JCYL, hasta el punto de  hacer que estas empresas multinacionales después de su reunión  con la JCYL  se sientan, presuntamente,  extorsionadas y amenazadas  si persisten en su  interés de invertir en este proyecto”.

Datos que también deberían conocerse por el parte del pueblo llano: “Para que tengamos  una percepción de la magnitud  del presunto robo sufrido que afecta a las provincias de León y Zamora,  durante estos  15 años se hubiese pagado a los agricultores  por las materias primas aportadas a la biorrefinería (maíz y remolacha) aproximadamente unos 1200 millones de euros, haciendo más rentables las  explotaciones agrícolas”.

“Ganaderos.  En estos 15 años hubieseis tenido en el mercado a vuestra disposición más de  dos millones de toneladas  de pulpas y DDG´, que hubiesen regulado los precios de los piensos,  ayudando a hacer viables  vuestras explotaciones ganaderas.”

“Se hubiesen creado o asegurado miles de puestos de trabajo estables durante los doce meses del año, entre directos e indirectos”.

“Zamora y León serían un referente nacional en la producción de biocombustibles, con un desarrollo económico exponencial para ambas provincias”.

“El estar reunidos aquí hoy solo puede tener un objetivo: la unión de todas las fuerzas políticas, agrarias, sindicales y  empresariales  de Zamora y león para conseguir de forma inmediata  que el proyecto de biorrefinería multifuncional de Barcial se convierta en realidad”.

Igea, vicepresidente de la Junta, también recibió su castigo: “No podemos aceptar lo dicho por el vicepresidente de la JCYL, en un brote de narcisismo político rayando lo delirante,  cuando afirmó que  “donde gobierna ciudadanos no hay corrupción”, porque los hechos probados dicen lo contrario”.

“Los ciudadanos de Zamora y León exigimos del presidente de la JCYL que solucione de forma inmediata este problema de presunta corrupción en su gobierno  y que la reparación sea proporcional al daño producido,  que se estima en  miles de millones de euros en estos 15 años”.

“El presidente Mañueco tiene el poder institucional necesario para solucionar de forma inmediata y contundente este problema”.  

“Esta tierra tiene fama de aguantar carros y carretas pero no es cierto, muchos colectivos, asociaciones y plataformas vienen manifestándose de forma permanente en los tres últimos años para exigir que se cumplan las promesas realizadas a estas tierras, que se tengan en cuenta nuestros derechos, que se cumplan los principios rectores de las políticas públicas. Nosotros somos uno de estos colectivos, nos concentramos hoy y seguiremos haciéndolo en futuro”.  

Tras la intervención de Fuentes, intervinieron Laura Rivera y representantes de las formaciones políticas que acudieron a esta concentración.

Después, como colofón, se arrojaron en la puerta de la Delegación rollos de papel higiénico y escobillas.