MI VECINA MARISOL
Vuelta la burra al trigo
Esta es la expresión que venía utilizando mi vecina Marisol cuando me la encontré, junto a su amiga Concepción, la eficiente funcionaria, con la que comparte todas sus cuitas, y le pregunté que a qué venía la protesta.
-Pues viene a que estamos como siempre-, me contesta, -en ésta Zamora, a la que tanto queremos, no le falta nunca algún tuercebotas que, en lugar de arrimar el hombro, para que podamos salir de ésta espiral económico-social tan negativa como en la que estamos, no hace otra cosa que poner impedimentos, palos en las ruedas y, lo que faltaba, no dar su brazo a torcer admitiendo un error y faltar a la verdad-.
-¿De quién hablas?-, le pregunto.
-Pues hablo del presidente de la Cámara de Comercio de Zamora, que ha hecho unas declaraciones descacharrantes en las que dice que Zamora 10 le ha puesto enfrente, para que le hagan la competencia, otros candidatos a las próximas elecciones a la presidencia de dicha cámara, que se celebrarán en mayo próximo. Y claro eso, cuando menos, tiene su gracia-, me dice mi vecina.
-No, muy democrático no parece el comentario-, le respondo, -cuantos más candidatos haya, mejor porque demostrará que hay interés por sacar a Zamora adelante a través de la Cámara de Comercio-.
-Efectivamente-, me dice Marisol, -pero como en la última elección salió Enrique Oliveira, porque no se presentó nadie más, pensaría que ahora iba a ser lo mismo y le escocerá que haya alguien que le haga sombra. Pero no es de recibo que diga que los otros candidatos se los ha puesto Zamora 10 porque eso tiene mucha pinta se ser una pataleta-.
Recordemos que la Cámara de Comercio y la CEOE – CEPYME abandonaron Zamora 10, hace ya más de un mes, de una forma vergonzante, argumentando que ya se había cumplido con el cometido para el que se creó la organización. ¿Qué cometido se ha finalizado?; ¿acaso se ha producido un crecimiento espectacular del tejido empresarial en la provincia?; ¿quizá se han creado montones y montones de puestos de trabajo? Nada más lejos de la realidad. Zamora 10 ha tenido un protagonismo importantísimo en el desarrollo de muchos proyectos que llevarán a ese crecimiento, pero no está todo hecho, ni mucho menos y la prueba clara es que Caja Rural se ha mantenido firme en la decisión de quedarse apoyando el magnífico proyecto y, lo que es mejor aún, hace unas semanas se unieron a Zamora 10 la Asociación de Jóvenes Empresarios de Zamora (AJEZA) y la Asociación Zamorana de Turismo, pilares fundamentales en el desarrollo y el progreso de Zamora, dando una lección de cómo deben hacerse las cosas, a los caducos y alcanforados prebostes de las organizaciones desertoras. Quizá por ello ahora les escueza la presencia de otras candidaturas que puedan volver a llevar al redil de la razón a una Cámara que, a la vista de cómo está la provincia, poco o nada ha hecho para evitar la hemorragia socio-económica que nos tiene en la UCI de la España vaciada.
Y continúa mi vecina diciendo -¡Vaya demócratas que están hechos si les molesta la existencia de otros empresarios que quieran implicarse!. Además, los que se presentan no son cualquiera, son un conglomerado de profesionales de distintas ramas de la empresa, industria y comercio, que están hartos de la palabrería y del no hacer nada de éstas organizaciones. Porque, digo yo-, añade Marisol, -¿Por qué no hacen lo mismo en la CEOE?. Se necesita otro cambio, igual de radical en la mayor organización empresarial de la provincia pues han demostrado, con su deserción, que les importa bien poco el futuro de Zamora y no se dan cuenta de que es su propio futuro y el de sus herederos, y de los nuestros-.
Tiene razón Marisol, lo que nos estamos jugando no son los egos de determinados caciques que con tal de no admitir que el de enfrente tiene un buen proyecto para Zamora, son capaces de poner zancadillas y boicotear las iniciativas, nos estamos jugando el que desparezca el tejido empresarial definitivamente, de manera que los jóvenes tengan que huir, más de lo que están haciendo ahora, porque aquí no encuentran bases de establecimiento. O eres funcionario, o tienes que conformarte con un salario pírrico porque tu trabajo no es valorado lo suficiente, ni en Semana Santa. Que le pregunten a los camareros, que han trabajado lo que no está escrito, cuantos incentivos les han dado por éstos días que Zamora ha estado hasta la bandera. Pues nada, son rácanos hasta en eso.
-Así que, vuelta la burra al trigo-, dice mi vecina. -Tendremos que seguir apoyando a Zamora 10, a sus proyectos, a sus integrantes y a todo aquel que quiera trabajar por esta abandonada tierra y por intentar detener la emigración galopante que tenemos-.
-Oye, Marisol-, le dice Concepción a mi vecina,-hoy no he tenido que llamarte la atención, no has dicho ni un solo taco, ¿estás reformándote?-.
-No, querida, estoy hasta los ovarios, pero me lo callo-, responde Marisol.
-Ya decía yo, al final tuviste que soltarla-, respondió Concepción y la agarró del brazo para ir a tomar el cafetito de media mañana. Con unas cañas zamoranas, evidentemente.
Kebedo.
Esta es la expresión que venía utilizando mi vecina Marisol cuando me la encontré, junto a su amiga Concepción, la eficiente funcionaria, con la que comparte todas sus cuitas, y le pregunté que a qué venía la protesta.
-Pues viene a que estamos como siempre-, me contesta, -en ésta Zamora, a la que tanto queremos, no le falta nunca algún tuercebotas que, en lugar de arrimar el hombro, para que podamos salir de ésta espiral económico-social tan negativa como en la que estamos, no hace otra cosa que poner impedimentos, palos en las ruedas y, lo que faltaba, no dar su brazo a torcer admitiendo un error y faltar a la verdad-.
-¿De quién hablas?-, le pregunto.
-Pues hablo del presidente de la Cámara de Comercio de Zamora, que ha hecho unas declaraciones descacharrantes en las que dice que Zamora 10 le ha puesto enfrente, para que le hagan la competencia, otros candidatos a las próximas elecciones a la presidencia de dicha cámara, que se celebrarán en mayo próximo. Y claro eso, cuando menos, tiene su gracia-, me dice mi vecina.
-No, muy democrático no parece el comentario-, le respondo, -cuantos más candidatos haya, mejor porque demostrará que hay interés por sacar a Zamora adelante a través de la Cámara de Comercio-.
-Efectivamente-, me dice Marisol, -pero como en la última elección salió Enrique Oliveira, porque no se presentó nadie más, pensaría que ahora iba a ser lo mismo y le escocerá que haya alguien que le haga sombra. Pero no es de recibo que diga que los otros candidatos se los ha puesto Zamora 10 porque eso tiene mucha pinta se ser una pataleta-.
Recordemos que la Cámara de Comercio y la CEOE – CEPYME abandonaron Zamora 10, hace ya más de un mes, de una forma vergonzante, argumentando que ya se había cumplido con el cometido para el que se creó la organización. ¿Qué cometido se ha finalizado?; ¿acaso se ha producido un crecimiento espectacular del tejido empresarial en la provincia?; ¿quizá se han creado montones y montones de puestos de trabajo? Nada más lejos de la realidad. Zamora 10 ha tenido un protagonismo importantísimo en el desarrollo de muchos proyectos que llevarán a ese crecimiento, pero no está todo hecho, ni mucho menos y la prueba clara es que Caja Rural se ha mantenido firme en la decisión de quedarse apoyando el magnífico proyecto y, lo que es mejor aún, hace unas semanas se unieron a Zamora 10 la Asociación de Jóvenes Empresarios de Zamora (AJEZA) y la Asociación Zamorana de Turismo, pilares fundamentales en el desarrollo y el progreso de Zamora, dando una lección de cómo deben hacerse las cosas, a los caducos y alcanforados prebostes de las organizaciones desertoras. Quizá por ello ahora les escueza la presencia de otras candidaturas que puedan volver a llevar al redil de la razón a una Cámara que, a la vista de cómo está la provincia, poco o nada ha hecho para evitar la hemorragia socio-económica que nos tiene en la UCI de la España vaciada.
Y continúa mi vecina diciendo -¡Vaya demócratas que están hechos si les molesta la existencia de otros empresarios que quieran implicarse!. Además, los que se presentan no son cualquiera, son un conglomerado de profesionales de distintas ramas de la empresa, industria y comercio, que están hartos de la palabrería y del no hacer nada de éstas organizaciones. Porque, digo yo-, añade Marisol, -¿Por qué no hacen lo mismo en la CEOE?. Se necesita otro cambio, igual de radical en la mayor organización empresarial de la provincia pues han demostrado, con su deserción, que les importa bien poco el futuro de Zamora y no se dan cuenta de que es su propio futuro y el de sus herederos, y de los nuestros-.
Tiene razón Marisol, lo que nos estamos jugando no son los egos de determinados caciques que con tal de no admitir que el de enfrente tiene un buen proyecto para Zamora, son capaces de poner zancadillas y boicotear las iniciativas, nos estamos jugando el que desparezca el tejido empresarial definitivamente, de manera que los jóvenes tengan que huir, más de lo que están haciendo ahora, porque aquí no encuentran bases de establecimiento. O eres funcionario, o tienes que conformarte con un salario pírrico porque tu trabajo no es valorado lo suficiente, ni en Semana Santa. Que le pregunten a los camareros, que han trabajado lo que no está escrito, cuantos incentivos les han dado por éstos días que Zamora ha estado hasta la bandera. Pues nada, son rácanos hasta en eso.
-Así que, vuelta la burra al trigo-, dice mi vecina. -Tendremos que seguir apoyando a Zamora 10, a sus proyectos, a sus integrantes y a todo aquel que quiera trabajar por esta abandonada tierra y por intentar detener la emigración galopante que tenemos-.
-Oye, Marisol-, le dice Concepción a mi vecina,-hoy no he tenido que llamarte la atención, no has dicho ni un solo taco, ¿estás reformándote?-.
-No, querida, estoy hasta los ovarios, pero me lo callo-, responde Marisol.
-Ya decía yo, al final tuviste que soltarla-, respondió Concepción y la agarró del brazo para ir a tomar el cafetito de media mañana. Con unas cañas zamoranas, evidentemente.
Kebedo.






















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