Aristóteles no tenía razón

Dicen que el amor mueve mundos. Convierte al ser humano en un ser irracional en muchas ocasiones, lo que se contrapone a la definición de "ser" de Aristóteles, que muestra en su obra "Política". En esta definición se concibe "al ser" como un "animal social, racional y político". Entonces, yo me pregunto, ¿por qué el amor, muchas veces, nos hace cometer locuras que nos lleva a definirnos como seres irracionales? En muchas ocasiones, esas llamadas locuras pueden ser vistas desde una perspectiva donde uno, si lo vive en primera persona, lo siente de lo más racional; pero un raciocinio que tiene un 90% sentimiento, y 10 % razón. También, pueden ser vistas por una tercera persona como la llamada: "locura del enamorado"; aquella en la que te tienes que encontrar, para poder sentir como aquel Romeo de Shakespeare siente.

Estamos definiendo "locura" en el amor, desde lo bonito de la palabra. Si lo lleváramos a los versos de un poema, este loco enamorado recitaría al final de sus versos:

"(...) y es que no conozco otra manera de querer,

que quererte con locura".

Y yo, como persona que se encuentra entre la definición de aquel filósofo griego llamado Aristóteles, y la "locura del enamorado"; es decir, percibiendo el mundo como ser racional e irracional, siento que si el texto del la "Política", de Aristóteles, hubiera caído en la selectividad que hice en el año 2015, hubiera escrito las líneas que se encuentran en la parte superior de este texto. Ahora, los alumnos que la están haciendo no pueden decir lo mismo en los textos que escriban 7 años después, ya que la "filosofía" de las pruebas para entrar en la enseñanza universitaria ha cambiando.

Hablando de mi examen de filosofía, recuerdo que, como texto para analizar, me entró: "El mito de la caverna", de Platón; una alegoría que ayudaba a entender el modo con el que el maestro de Aristóteles concebía la relación que existía entre lo físico y el mundo de las ideas, y como el ser humano, existe y se mueve dentro de él. Y es que también pienso en lo que hubiera puesto si me lo mandaran analizar a día de hoy; pensemos: ¿acaso no vivimos en una realidad similar a la que se expone en el mito que Platón creaba? Ahí, donde están presentes las luces y sombras, los engaños, la liberación...

Pienso también en como aquel "loco enamorado" recitaría un poema sobre la realidad que muestra Platón el este mito:

"En una caverna se encuentra

aquel loco enamorado,

que ve con sombras, y no luces,

a ese amor que le reclama un te quiero;

pero que no lo ve,

porque está ciego".