El Cerco de Zamora: una historia para llevar al cine y teatro

Hay zamoranos que piensan en su tierra, en su desarrollo, en su cultura, en no dejarla morir. Verbigracia: María Vega, la promotora del I Festival de Cine Zamora Enamora de Comedia, que se celebrará esta semana en el Ramos Carrión, merced al patrocinio de Diputación y Caja Rural. 

Asistí a la rueda de prensa de presentación. Al escuchar a los distintos protagonistas, se me ocurrió plantear, y ahora lo voy a contar, una posible película sobre El Cerco de Zamora, que es un drama familiar, una tragedia que podría ser escrita por Shakespeare: El Rey Lear. Ricardo III, Macbeth, Hamlet. Lo tiene todo. Y si no hubo amor entre los personajes en aquella Zamora de 1072, habría que introducirlo para que el film reuniera todos los atractivos posibles. Hay héroes en ambos bandos: Vellido Dolfos y Rodrigo Díaz de Vivar; personalidades idealistas como Arias Gonzalo y sus hijos; un rey asesinado, Sancho II; otro monarca, el padre de Alfonso VI, Sancho II, Urraca, Elvira y García, al que uno de sus hijos traiciona. Y guerra. Y una ciudad que no se rinde, que posee unas murallas famosas en la alta Edad Media, una fortaleza casi inexpugnable, y un Romancero.

El escenario ya lo tenemos. Castillo, al que haría falta otra restauración, unos campos, un río fantástico. Los personajes, con un estudio psicológico diáfano: ambición, felonía, idealismo, fidelidad…No falta un escrito, un autor de teatro, que ponga la carne, el músculo, el rostro en este esqueleto histórico. Yo creo que en Zamora hay un hombre, intelectual, histórica y literariamente capacitado para crear un argumento. Se llama Daniel Pérez, fue director del Teatro Principal durante décadas. Ahora está jubilado. Por lo tanto, tiene tiempo. Director; Víctor Erice, un genio, que ya editó imágenes de Zamora en la grandísima película "El Sur".

Ayuntamiento y Diputación deberían reflexionar sobre este proyecto, abierto a la cinematografía y al teatro, que podría ser un punto de inflexión en nuestro turismo. Hagamos del turismo cultural, histórico y cinematográfico nuestro motor económico, además de transformar materias primas, extraordinarias, en empresas zamoranas, con lo que la plus valía quedaría aquí y también se daría trabajo a los zamoranos.

Fromago se ha cerrado con un éxito inimaginable, que ha sorprendido a sus propios autores, Diputación y Zamora 10. Habrá otra edición. Y me imagino que los zamoranos más inteligentes, lo que, en verdad, aman a su tierra, aportarán nuevas ideas para engrandecer nuestra tierra, para sacarla de su ostracismo, de su decadencia cultural y económica. Acabemos con el secular caciquismo, renovado por los politicastros, a través de la cultura.  Aporto una idea más. Hagámosla realidad.

Eugenio-Jesús de Ávila