"¿En qué momento defender nuestros derechos reproductivos se convirtió en estar de acuerdo con la reducción de penas de violadores?"

Castilla y León se está ya acostumbrando a ser noticia nacional por los encontronazos en las Cortes y los anuncios que llegan desde el vicepresidente de Vox, García-Gallardo Frings, para sorpresa del Partido Popular, como ha ocurrido en las últimas dos semanas, tras el anuncio del protocolo para las mujeres embarazadas que, en nuestra comunidad, manifiesten su intención de abortar. 

Varias organizaciones feministas, reunidas en la Plataforma Feminista CyL, habían convocado concentraciones frente a las sedes del partido, "en defensa del derecho al aborto y contra la coacción de un partido político" y, a pesar de la falta de asistentes, han querido agradecer "a todas las mujeres y organizaciones que han apoyado cada concentración feminista en favor del derecho al aborto. También nos gustaría agradecer a personas y entidades que, digitalmente nos han apoyado, pero no han acudido presencialmente".

Las organizaciones convocantes se han mostrado comprensivas con la casi nula asistencia a las concentraciones: "Entendemos q posicionarse frente al gobierno de nuestra comunidad puede conllevar consecuencias políticas y económicas. Dejamos claro en que el feminismo no se doblega ante ningún partido político, nuestros derechos no son cuestionables".

"Así es: en 2023 se sigue poniendo en duda, y por ello también seguridad y la en riesgo, la autonomia, la libertad de las mujeres que tomamos la decision de abortar. En la politica, asi como sucede en la sociedad, se ha demostrado históricamente que nuestros derechos, como decia Simone de Beauvoir, nunca se dan por adquirido y siempre vuelven a ser cuestionados".

"Si verdaderamente se quisiera disminuir el número de abortos en nuestra Comunidad Autonoma, y en cualquier oto lugar, habría que empezar por diseñar políticas públicas de educación para la salud sexual y reproductiva que resulten constructivas y pedagógicas en los centros de enseñanza. Habría que garantizar el acceso a los métodos anticonceptivos de última generación y promover el uso de anticonceptivos masculinos, que son los eternos olvidados, a pesar de los graves daños que se sabe que nos causan la mayoría de los que usamos nosotras. Habría que promover condiciones de vida digna para las mujeres, que nos permitan desarrollar nuestros proyecto de vida a todos los niveles. Porque el derecho al aborto es, también y en gran medida, una cuestion de clase".

Esperando la llegada de las feministas, las sedes de Vox han amanecido luciendo pancartas con un reto: "200 violadores han ganado con vuestro gobierno, ¿por eso no protestáis?" en el que las feministas no quieren entrar, pues, para ellas, no es más que el lema que demuestra que Vox se ha quedado sin argumentos, pues "no sabemos ¿en qué momento defender nuestros derechos reproductivos se convirtió en estar de acuerdo con la reducción de penas de violadores?".