El PSOE, o una socialburocracia chapucera e impune

   Parece sacado de cualquier relato, y no precisamente el de la maturranga mediática al uso, o sea, relato por aquí y relato por allá, lo cual significa cuento con pócima e historieta de buhonero, carromato y jamelgo incluidos. Relato más bien de Kafka, en lo extremo e hilarante del costoso absurdo.

   Es sabido, es conocido. Un Estado social como el padecido, que mediante sus burocracias interviene los aspectos más nimios de nuestra existencia valiéndose de los impuestos igual que de la invasión de la vida privada y familiar, resulta que de buenas a primeras se permite, junto a sus castas progresistas disfrutando de latisueldos de decenas o centenares de miles de euros, el error delirante de unos cálculos fallidos por el sumar y el restar, en lo que concierne a vías, túneles y ferrobuses, ingeniería sin duda de altos vuelos para la época que vivimos. Ello sin que nadie, comenzando por la ministra del ramo y todo su staff de incompetentes/as, dimita a más tardar por simple vergüenza torera. De no ocurrir, lo  cual va en el cargo y el latisueldo de casta, lo procedente sería su cese inmediato por el responsable máximo del engendro, no otro que el Sánchez gran timonel y turista de falcon gratis a expensas del erario, mientras el país se le cae a pedazos. 

   Cualquier paniaguado comprado con la pensión de una Seguridad Social en quiebra y una sanidad y educación calamitosas, se resiste a aceptar la cruda realidad, afectando incluso como afecta a sus hijos y nietos por generaciones. Realidad desvergonzada de una Burocracia que, bajo bandera de un socialismo bolivariano disimulando las muchas vergüenzas de una sobada socialdemocracia, actúa en la más descarada impunidad, sin rendir cuentas de sus chapuzas, de su mediocridad, de su incompetencia a la honrada ciudadanía, si es que de ella queda algo fuera del momio general de los no contributivos, parados, subvencionados y universales beneficiarios del muy rentable y obsequioso Bienestar. En su versión de Estado y aparato, el socialismo actual, por aquí PSOE, PSOE y más PSOE al abrigo de sus apéndices comunistas y separatistas, lo que ofrece previo pago y deuda de un presupuesto quebrado  es precisamente eso: privilegio, chapuza e impunidad, por lo que concierne a su desastrosa gestión de la cosa pública.