El Partido Popular regresa a la Alcaldía de Toro, con Rafael Jesús González, que gobernará en minoría

Aunque había cierta emoción ante el pleno de investidura del Ayuntamiento de Toro, Tomás del Bien eligió entregar la Alcaldía a la lista más votada, la del popular Rafael González Franco, al no votar a favor del candidato socialista, Carlos Rodríguez Casares, insistiendo en la fractura con su antiguo partido, el PSOE de Zamora, empeñado en mantener a Del Bien alejado de sus siglas, un decisión que no ha terminado siendo muy beneficiosa para los socialistas toresanos y provinciales, que se han quedado sin Ayuntamiento y ya perdieron hace cuatro años la Diputación.  

Rafael González Franco comenzó, por tanto, ayer, su mandato, que será, sin duda, difícil, aunque en su discurso apelara al trabajo conjunto a favor de Toro. Recordemos que su lista, la más votada el pasado 28 de mayo, obtuvo cuatro concejales, por otros cuatro del PSOE (en las elecciones del 2019 fueron ocho concejales) y tres de "Nos Movemos por Toro", más los dos que se reparten entre Futuro y Zamora Sí.

Nos movemos por Toro y el PSOE, por lo tanto, sumarían siete concejales, pero no fructificó la idea del regreso de Tomás del Bien, alcalde durante ocho años, al Partido Socialista, y Del Bien ha mantenido su coherencia y dignidad, negando su apoyo al candidato socialista toresano. 

El nuevo alcalde, Rafael González Franco, se ha mostrado ilusionado y orgulloso: "Es un orgullo, y a la vez una gran responsabilidad que asumo con ilusión. Soy consciente de que la lista que encabezó no goza del apoyo de una mayoría absoluta, lo que requiere un claro ejercicio de humildad, de autocrítica y de análisis que, les aseguro, hemos hecho y seguiremos realizando. La nueva realidad política municipal, con su consiguiente distribución de representantes en este salón de Plenos, contiene inequívocos mensajes que no debemos desvirtuar. Los toresanos han reclamado una mayor pluralidad y, por tanto, nos demandan más diálogo entre los partidos y un mayor acercamiento. Creo firmemente que lograr compromisos en busca de la mejor gestión y respuesta no significa renunciar a convicciones ideológicas, sino demostrar lealtad para con el vecino. Existen amplísimos territorios en los que podemos y debemos encontrarnos y, sobre todo y por encima de todo, está el interés por Toro, que es una militancia que todos deberíamos compartir siempre. Toro merece la pena, no os podemos defraudar, intentaremos y conseguiremos representar con absoluta integridad y honradez. Es tiempo de concordia, de consenso y de generosidad. Hoy es tiempo de hablar de lo nos une y no de lo que nos separa. Gracias por la confianza que habéis depositado en nosotros."