No es esto, no es esto ¡España ¡

En España estamos viviendo una situación preocupante, que sólo desde el espíritu democrático y desprendido, se puede contribuir a invertir. El proceso con el que Pedro Sánchez ha sido investido presidente de Gobierno, ha estado nutrido de un vergonzoso interés personal y con falta a la palabra expresada por él y sus colaboradores, en repetidas ocasiones. Para ellos el fin justifica los medios.

Podemos resaltar las declaraciones del nuevo ministro de Transportes y de Movilidad Oscar Puente en TVE en las que dijo: “Si no hubiéramos necesitado, probablemente los 7 votos no se hubiese adoptado el acuerdo de presentar la Amnistía” al darse cuenta de lo que dijo rectifica y dice: “pero a lo largo de la Legislatura se hubiera presentado.”

Pedro Sánchez y sus ministros repitieron muchas veces, que jamás formarían Gobierno con Podemos, que no pactarían con EH Bildu y que no habría amnistía para los implicados en los delitos que condujeron a la dramática jornada del 1 de octubre de 2017 en Cataluña.  Anunciaron que nunca habría referéndum de autodeterminación. Pero ya no podemos estar seguro de ello, ya que los Partidos Independentistas y Secesionistas Catalanes y Vascos aseguran que, si lo habrá, y se constituirán como Naciones separadas de España.

 El PSOE ha pactado su investidura con EH Bildu, que ha firmado acuerdos con el PNV, que son de dudosa constitucionalidad, y con Junts per Catalunya y ERC, plenamente contrarios a nuestra Constitución, pues fomenta la desigualdad entre españoles e incluye una ley de amnistía sin cabida en nuestro ordenamiento jurídico, como los representantes socialistas afirmaron tantas veces. Tampoco ignoramos que las mesas de diálogo y negociación para profundizar en la pretendida solución al conflicto político de Cataluña, pueden desembocar con toda seguridad en un referéndum de autodeterminación que les permita separarse de España.

Pedro Sánchez ha implementado una ley de amnistía contra la legalidad vigente y ha cercenado la autoridad del Poder Judicial en sus acuerdos. Además de ser una enmienda a la democracia española, hemos de expresar que no se trata de honestidad, ni de pensar en el bienestar de España, es la pura necesidad de presidir el Gobierno lo que las lleva a presentar la Ley de Amnistía que no está en nuestra Constitución,

 Las Cortes Generales no pueden amnistiar a ningún acusado o prófugo sin faltar a la Justicia ni al carácter de España como país democrático, pues también están sometidas al imperio de la ley. Esperemos que en esta locura que ha entrado el PSOE, no se salga del marco Constitucional como sus socios de investidura. O nos proponga junto a ellos un referéndum de Monarquía o Republica.

Estamos seguros de que el fatídico 1 de octubre de 2017, y las algaradas subsiguientes, fueron el resultado de que los partidos que lo avalaron, se convirtieron en una oligarquía frívola e irresponsable que malversaron fondos públicos, lanzaron a los ciudadanos a la calle, cometiendo actos de violencia e incendiando con barricadas Barcelona. La Generalitat de Cataluña dejó a la población catalana en el más absoluto desamparo jurídico tras la renuncia del Govern a acatar la Justicia y llevar a cabo una Declaración Unilateral de Independencia, con absoluta deslealtad a los principios constitucionales de nuestra democracia.

No podemos ver normal ni aceptar que el Gobierno de España se haya decidido mediante un pacto negociado de forma clandestina, y este sujeto a un chantaje permanente, cuando algún dirigente SECESIONISTA afirma que este Gobierno se sostendrá mientras se abone puntualmente y sin rechistar los pagarés que le vayan presentado al cobró, y lo más humillante para España, visado por observadores extranjeros que pagaremos como he dicho en otras ocasiones por todos los españoles.

Si en estos momentos no luchamos por nosotros, luchemos por las generaciones que han de venir y por las generaciones que se nos fueron. “Si dejamos de defender ahora nuestra Constitución, es inútil pensar que la podamos defender después.”