Igualdad en el grupo Norte tras la primera jornada de Liga

Contemplé ayer, por la tarde, el partido Bilbao Ath-Andorra, para conocer a otros dos rivales de los rojiblancos en esta temporada 2024-2025. Perdió, por la mínima, merced a un gol marcado nada más empezar el encuentro por el joven -18 años- talento vasco Olabarrieta. Los del club de Piqué fueron incapaces de empatar, tuvieron sus oportunidades, pero el meta Mikel Santos realizó dos intervenciones colosales.

Me interesa subrayar que la escuadra del Principado de Andorra, recién descendida de la Segunda División, la forman jugadores veteranos, con experiencia, pues, y algunos de sus componentes, con talento. El filial del Athletic Club, recién ascendido, tiene jugadores que, a no tardar, jugarán en Primera División. Sin duda, los vascos me parecieron mucho mejor conjunto que Osasuna Promesas. Y Andorra me gustó. Creo que será uno de los favoritos para jugar la fase de ascenso.

Tras la primera jornada se evidencia una gran igualdad en el grupo norte -cuatro empates-, porque, a excepción de la Cultural, ningún equipo se impuso por más de un gol y se dieron muchas igualadas, el resultado que el Zamora CF mereció en Tajonar. Pero no voy a entrar en esa discusión bizantina entre lo que es justo o injusto en un deporte tan especial como el fútbol. Los rojiblancos perdieron por un error defensivo. La falta, lanzada desde la medular, pudo haber sido abortada por Altube, porque un cancerbero con su estatura debe imponer su autoridad en el área chica. El meta rojiblanco se quedó bajo palos y Espejo remató fácil. Imposible fallar.

El problema principal de los rojiblancos lo encontré en la incapacidad para concretar algunas excelentes acciones de ataque durante la primera entrega y la impotencia para debilitar a una defensa cerrada que planteó Osasuna después de marcar su gol. No hubo buenos centros desde las bandas ni tampoco desde el córner, pese a contar con dos jugadores de toque de balón exquisito como Márquez y Ramos, cuando se incorporó al partido en la segunda mitad. De tal manera, los delanteros quedan vendidos porque no reciben envíos dignos para rematar a puerta.

Entre las cosas que me gustaron de los rojiblancos escribiré que la velocidad en el despliegue en ataque durante la primera mitad, porque Juan Sabas cuenta con delanteros muy veloces y técnicos y centrocampistas que saben jugar la pelota al primer toque.

La defensa estuvo bien, aunque los centrales, los de más envergadura, quizá se quedaron pasmados en el lanzamiento de falta del gol osasunista. Bien los dos laterales y también Castañeda cuando salió en la segunda mitad: de sus botas salió el mejor centro del partido. Y enfatizo en que las ocasiones del Promesas solo creo peligro, en tres ocasiones, merced a los errores de los rojiblancos.

El equipo, por otra parte, corrió mucho, demostró un buen estado físico, pese a jugar el primer partido de la temporada. Y, no hará falta enfatizarlo: hay jugadores con muchísima clase y cuenta con delanteros muy rápidos. No puedo juzgar a Roni porque jugó poco y apenas tuvo oportunidad de demostrar su fama futbolística.

Corolario: estimo que habrá muchos partidos que se definan en faltas y saques de esquina, lo que denomino fútbol estático. Se me fío de los resultados de esta primera jornada, la igualdad presidirá la competición. Los errores definirán las derrotas. Se requiere seriedad, escasas frivolidades en la medular y en la salida del cuero y concretar las pocas oportunidades que se generen en ataque. El Zamora tiene plantilla para agarrarse a la Primera División RFEF. El próximo domingo toca ganar y ganar. La afición debe convertirse en el jugador número 12, tal cual la fase de ascenso.

Eugenio-Jesús de Ávila

Fotografía: Zamora  Club de Fútbol