Emprendedores de Zamora y en el mundo rural

Gonzalo Julián

Hoy he sentido una de esas sensaciones que, no por menos frecuentes, dejan de llenarte el espíritu... y la esperanza en esta tierra. En nuestras gentes.

Hemos realizado una salida, de las que hacemos periódicamente, por nuestras comarcas y pueblos. El objetivo era conocer un proyecto que, en la propuesta, parecía más pretencioso que posible. La sorpresa ha sido doble y muy agradable. Llena de futuro. He visitado  la empresa AGROBERRY en la localidad de ALMENDRA y a su fundadora, propietaria y “alma mater”: NURIA ÁLVAREZ.

Nuria, tras su salida de Zamora para realizar su formación universitaria y después de varios trabajos... recaló en Irlanda, donde obtuvo un reconocimiento profesional y personal que le hicieron pensar que allí continuaría su futuro hasta hacerlo presente. Pero no fue así. Sus inquietudes personales y de emprendimiento, la trajeron de vuelta a su pueblo, Almendra, –algo que tantas veces hemos pedido, demandado, solicitado desde aquí... pero que en tan pocas ocasiones se ha visto que ocurriera–. Tras analizar, estudiar y proyectar  en varios sectores en los que fijar el proyecto de empresa que crearía, decidió, como he dicho, que sería en su pueblo y en el entorno agroalimentario y con productos propios. La decisión fue plantar, ver crecer, recolectar y elaborar productos con la ZARZAMORA, planta tan unida a esta tierra, también fonéticamente.

Y así fue. Su producción de extrema calidad,  y cuidada con primor, continua con la elaboración en unas instalaciones modernas, donde todo está perfectamente diseñado y montado para realizar su función. También el  envasado y la  comercialización se realiza  en y desde la misma localidad.

La calidad del proyecto, tanto de producción como  empresarial, lo han hecho merecedor de varios reconocimientos y premios en su aún corta vida, incluida la asignación de una plaza de ERASMUS EMPRESARIAL, que ya ocupa un joven italiano y que pronto ha de iniciar su propia inversión y proyecto, seguramente en su país, tras la formación aquí recibida.

Ya son tres los productos que se comercializan: mermeladas, licores y bombones. La dulzura de todos ellos, producidos con un fruto que lleva a “Zamora” en su corazón, no pueden más que presagiar un éxito, tan seguro como merecido. Enhorabuena desde las páginas de EL DÍA DE ZAMORA y recomendarles que si algún día tienen la oportunidad de “dejarse caer” por aquellos lugares, no dejen de acercarse a Almendra donde podrán ser partícipes de la experiencia que les he expuesto aquí.