Caja Rural CB Zamora vuelve a imponerse a Valladolid (85-86), pero su victoria fue pírrica

Caja Rural CB Zamora ganó al Valladolid en la Copa de España de Baloncesto, en partido jugado esta noche, en Pucela. Podría afirmarse que fue una victoria pírrica, porque no le dio la clasificación para la siguiente fase a la escuadra azul, pero yo me quedaría con que los hombres de Saulo Hernández Bris ganaron su cuarto partido serio de la temporada, aunque fuese de otra competición. Queda, pues, un triunfo por un punto 85-86, y que la escuadra zamorana se impuso a la vallisoletana por segunda vez en esta campaña.

Fue un partido extraño, porque Caja Rural salió muy mal a la pista, anotando solo ocho puntos y recibiendo nada menos que 18 en los primeros cinco minutos de ese primer cuarto. Saulo decidió parar la avalancha de juego local y corregir los errores en defensa domésticos. Y surtió efecto. Hanzlik, con un triple a falta de 53 segundos anotaba un triple primoroso que colocaba a su equipo a cuatro puntos (24-19) y Buckingham, que esta noche volvió a ser líder, acercaba más aún a la escuadra azul para dejar los primeros diez minutos en 24-21.

Pero, de nuevo, pájara para iniciar el segundo cuarto, porque Caja Rural se tiró cinco minutos sin anotar mientras Valladolid se iba a 15 puntos de diferencia (36-21). Y, de nuevo, el enfado del técnico zamorano con su plantel ofreció réditos, porque al descanso se llegaría con un 48-40. En cinco minutos, la escuadra azul recortó siete puntitos.

Y, más de lo mismo, en el tercer cuarto. Caja Rural de Zamora se creyó que podía ganar, de tal manera, que fue acercándose en el marcador, merced a una gran defensa y a aciertos en ataque. Llegó a quedarse a un punto de Valladolid. No obstante, la escuadra azul jugaría con siete puntos por debajo. 13 puntos para acceder a la siguiente fase de la Copa de España.

Y, a decir verdad, los últimos diez minutos del equipo que dirige con magisterio Saulo Hernández fueron excelentes en defensa, dejando a Pucela en solo 11 puntos y poniéndose por delante en el marcador a falta de un minuto y veintidós segundos para el finiquito: (81-83), dos puntos y otros dos más cuando quedaban 49. Quizá la fortuna en un rebote, evitó que Caja Rural se fuese a por la eliminatoria en los instantes finales, jugados como partida de ajedrez por los dos entrenadores. Hernández Bris quería el empate y el técnico de Valladolid prefería la derrota antes de una prórroga. Y no hubo tiempo añadido para ese tiempo de más, en el que la dinámica del choque otorgaba más posibilidades a la escuadra zamorana.