El Zamora CF minimizó a Unionistas en el Reina Sofía

Se comentaba esta semana que el Unionistas era muy superior al Zamora CF y que iba, no solo a ganar, sino golear a los rojiblancos. Quizá como apuntaban los agoreros, la escuadra charra sea extraordinaria y forme una plantilla superior, de las mejores del grupo; pero, a decir verdad, ayer noche, las huestes de Juan Sabas exhibieron un fútbol de calidad superior al de Llácer. Quizá Unionistas conforme un equipo colosal, pero el rojiblanco lo minimizó hasta reducirlo a la mediocridad. Si se repartieron puntos se debió más al azar que a los méritos locales. Un saque de banda, un jugador charro al que le toca el balón en la testa para ir a parar a los pies de Rastrojo, que marco con rabia. El Unionistas no dio nunca sensación de peligro, salvo en el fútbol estático, como el que originó su gol como en los saques de esquina y faltas cercanas al área rojiblanca.

Durante la primera mitad, la escuadra zamorana se quedó con la pelota. Se jugó al ritmo que impusieron los Clavería, Ramos, Macho y Márquez. Los jugadores locales solo miraban cómo la pelota iba de un rojiblanco a otro sin solución de continuidad. Solo las faltas y el consentimiento de un árbitro ultra casero permitieron lidiar a Unionistas el partido. Pero los rojiblancos, escasos de delanteros titulares en forma, erró en centros y últimos pases. No obstante, la gran voluntad de Macho, Sergio Nieto, que realizó una de las acciones más brillantes del partido, y Rufo, como siempre trabando a destajo en la banda derecha, tanto en ataque como en defensa.

Y, como el centro del campo fue rojiblanco, la zaga zamorana apenas tuvo problemas para evitar algunos ataques blanquinegros durante la primera mitad. Después, en la segunda entrega, la defensa zamorana tuvo más trabajo, pero, como he escrito con anterioridad, en despejar balones lanzados a la hoya, pues los dos laterales rojiblancos, Nieto y Castañeda fueron superiores a sus pares.

Aunque sea una ucronía futbolística, con Tresaco, Joel Priego y Mancebo en forma, el Zamora CF habría ganado con solvencia en el estadio Reina Sofía. Por lo tanto, el mérito de Juan Sabas sigue siendo extraordinario, porque, con lo que le queda, sin los citados, más Campabadal, Dani Hernández, Juanan y Roni, el cuadro rojiblanco sigue buscando la victoria en cualquier campo, tanto en su feudo como en visitas. De momento, después de trece jornadas, no ha habido equipo superior al Zamora, ni tan si quiera la intratable Cultural Leonesa. Las derrotas rojiblancas se debieron más a errores domésticos que ha virtudes ajenas.

E. Navascués de Zubiría

Fotografías: ZCF