El Zamora CF sabe cómo jugar para no perder ante el Nastic

El Zamora CF juega hoy, en Tarragona, a una hora normal: 17.30 horas. No obstante, el encuentro no lo es, porque los rojiblancos necesitan sumar, al menos, en los dos partidos que restan para cerrar el año 2024, cuatro puntos. La escuadra que dirige Sabas no debería perder ninguno de esos dos choques, el primero, el de esta tarde, ante un Nastic que siempre está ahí, arriba, pero que lleva dos jornadas sin conocer la victoria; es más, dos derrotas para un club que quiere regresar a la Segunda A, tras tenerlo muy cerca la anterior campaña.

Cierto que el Zamora no jugó su mejor partido ante el Orense, pero nos hemos olvidado de que había jugado 120 minutos en la Copa un miércoles y 72 horas después disputaba tres puntos ante un equipo en racha. Si los rojiblancos no brillaron en ataque como en anteriores compromisos se debió a ese cansancio acumulado y a la mala fortuna, porque defensas gallegos sacaron balones desde a misma línea de gol. Pero eso es pasado.

Hoy toca puntuar en Tarragona. Se trataría de hacerse con la pelota en la medular. Ara lograrlo, el técnico rojiblanco debería formar con tres hombres claves en la medular, como Ramos y Clavería y la ayuda imprescindible de Guille Macho, incluso apostaría por un cuarto futbolista en esa zona neurálgica, Gorjón, que colaboraría también en las tareas de achique defensivas, donde volverá Carlos, tras la sanción a Bolo, que haría pareja con José Carlos, mientras Campabadal ocupará el lateral derecho de la zaga y Sergio Nieto, en la izquierda. Y en punta, quizá solo dos hombres, lo más hábiles y rápidos, como Tresaco y Joel Priego.

Hasta la fecha, el Zamora se a enfrentado a todos los equipos del grupo.  En ninguno de esos partidos el rival demostró superioridad técnica ni física a los rojiblancos. Pero los errores, casi siempre individuales, en defensa, condenaron el buen juego de los hombres de Sabas. Toca, pues, ser muy serios en la zaga y no perder valones en la medular, desde donde el contrario puede iniciar sus ofensivas sobre la portería de Fermín con ventaja.

Y, por supuesto, acertar en ataque y que los centros al área sean precisos, dignos de ser rubricados y convertidos en gol.