
COSAS DE DE LA BIEN CERCADA
Urgencias para embellecer Zamora
Eugenio-Jesús de Ávila
Las Edades del Hombre 2025, magno acontecimiento artístico cristiano, que se celebrará en nuestra ciudad, debería aprovecharse para colocar a Zamora en la jerarquía del turismo cultural. Se prevé que en octubre se inaugure. Durante estos meses que quedan para que Zamora se convierta en ciudad abierta al arte, Iglesia y Ayuntamiento tendrán que suturar las heridas urbanísticas que padece la ciudad del Romancero. Sé que el tiempo nos devora y la utopía presidirá que el deseo se convierta en realidad. No es óbice para que se trabaje en ese afán. Urge que la Torre de la Catedral sea visitable. Urge restaurar el Castillo, que no ha recibido ninguna atención desde los últimos meses del segundo mandato de Rosa Valdeón. Urge evitar pintadas en muros y fachadas del casco histórico. Urge que los zamoranos mimen y cuiden su ciudad.
Ya sé que es imposible que el recinto amurallado de la bien cercada luzca restaurado que se ejecute un segundo Plan del Casco Antiguo, que se dote a los jardines de Baltasar Lobo de un sistema de fuentes que dé más vida al romántico parque, que se acabe con los solares abandonados. Punto. Hay más. Pero debemos asumir esas labores urbanísticas. ¿De acuerdo? Creo en Francisco Guarido.
Eugenio-Jesús de Ávila
Las Edades del Hombre 2025, magno acontecimiento artístico cristiano, que se celebrará en nuestra ciudad, debería aprovecharse para colocar a Zamora en la jerarquía del turismo cultural. Se prevé que en octubre se inaugure. Durante estos meses que quedan para que Zamora se convierta en ciudad abierta al arte, Iglesia y Ayuntamiento tendrán que suturar las heridas urbanísticas que padece la ciudad del Romancero. Sé que el tiempo nos devora y la utopía presidirá que el deseo se convierta en realidad. No es óbice para que se trabaje en ese afán. Urge que la Torre de la Catedral sea visitable. Urge restaurar el Castillo, que no ha recibido ninguna atención desde los últimos meses del segundo mandato de Rosa Valdeón. Urge evitar pintadas en muros y fachadas del casco histórico. Urge que los zamoranos mimen y cuiden su ciudad.
Ya sé que es imposible que el recinto amurallado de la bien cercada luzca restaurado que se ejecute un segundo Plan del Casco Antiguo, que se dote a los jardines de Baltasar Lobo de un sistema de fuentes que dé más vida al romántico parque, que se acabe con los solares abandonados. Punto. Hay más. Pero debemos asumir esas labores urbanísticas. ¿De acuerdo? Creo en Francisco Guarido.
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