Ineptos al mando

Pasan mis ruedas las fronteras, dejando atrás las Galias, hirviendo por la calima, mientras la radio habla en diversas emisoras con programas profundos, debates con expertos, emisiones de alta cultura, seria... Al llegar a España no hallo apenas alguna emisora decente, en los debates cacarean personajillos de televisión y alborotadores con grande verborrea e inteligencia somera... La necedad impera dentro de nuestras fronteras. No es extraño, diversos gobiernos arruinaron los canales públicos, introduciendo en sus cuadros dirigentes a los amiguetes del partido a quienes "había que colocar", necios como ellos mismos. Así machacaron, entre otras, la radio clásica.

            El asfalto de las carreteras se deteriora: ¡imprecaciones justicieras! El aeropuerto más importante de un país como España se colapsa por errores, las gentes pierden los aviones, en filas enormes, como bóvidos maltratados, en grandes rebaños sufren los horrores. Nuestro prestigio cae, se abisma como un país subdesarrollado. Los trenes se paran por fallos torpes en medio de la campiña, mientras se recuecen dentro sus ocupantes... El informe de las eléctricas, después de meses de investigaciones, señala a la Red Eléctrica general como la única responsable del gran apagón nacional, porque no había suficientes plantas y faltaba programación. Nuestro sistema, "propio de un país europeo", cayó como si estuviéramos en una república bananera: subdesarrollados sumidos en el ridículo porque nuestros dirigentes son ineptos, ineficaces, necios... Gravísimas consecuencias tuvo ese apagón para la economía y la seguridad nacional y demostró que estamos bordeando el abismo. Es un problema que salpica a casi todos los partidos. Los que gobiernan se muestran especialmente estúpidos, necios y, por tanto, criminales, sí, digo bien, traidores al país del que se aprovechan y criminales, ya que las consecuencias de dirigir quien no sabe pueden ser gravísimas y hacer perder fortunas o seguridad o incluso la vida si hablamos de hospitales o carreteras. Hay malvados intencionados, pero la mayoría lo son por interés propio, porque quieren colocarse en puestos donde reciben ricos sueldos y mandan sin saber, sin estar preparados para satisfacer la voluntad general: el bien del pueblo al que dicen representar.

            Mientras los médicos protestan ante el deterioro sanitario, el ministerio responsable de la salud nacional gasta los dineros con campañas de lemas tiernos, elegantes y "respetuosos" con todos (virtud, pureza, decencia y otras palabras lejos quedan): "Hoy follas seguro", para celebrar el día del orgullo LGTBI+ y ante el preocupante aumento de las infecciones de transmisión sexual. Lemas que inducen a la fornicación alegre envuelta en plástico preservativo. A esto parece reducirse la ideología que gobierna, mientras los quirófanos esperan con listas inmensas de enfermos, entre quejas.

            Quienes trepan a los puestos de mando en los partidos y a quienes colocan los gobernantes, amigotes de su mafia, suelen ser mentecatos, apenas preparados para la función a las que se les destina: infamia trágica.

Ilia Galán Díez

Catedrático de Estética y Teoría de las Artes Humanidades: Geografía, Historia y Arte Universidad Carlos III de Madrid /Full Professor in Aesthetics and Theory of Art Humanities Department: …