Vecinos de Pinilla denuncian graves problemas por ruidos en fiestas privadas

Como vecinos que no hemos podido dormir a causa del ruido por otra fiesta en un establecimiento privado, queremos dar nuestra opinión constructiva e intentar aportar alguna solución al tema.

Creemos que en Zamora tenemos un grave problema a causa de los ruidos y trastornos que causan las fiestas privadas. Ayer, un día laborable, ocurrió en las aceñas de Pinilla. Algo que aún no llegamos a comprender porqué se permite hacer. 

En lo que llevamos de verano, ya se han realizado otros eventos con música alta allí hasta bastante tarde, y hemos aguantado pacientemente, pero lo de ayer ya no tiene explicación: música a todo volumen hasta pasadas la 1 de la madrugada. No nos quejamos por gusto, solo reclamamos nuestro derecho al descanso nocturno.

Las molestias no solo las hemos sufrido en  el barrio de Pinilla, sino que en el otro lado del río: en el Puente de Hierro y Puerta Nueva, molestaba probablemente más, debido al alto volumen de la música y la dirección de varios altavoces exteriores. Por ejemplo, en la residencia de mayores de Puerta Nueva se oía todo y hasta era el tema de conversación de los paseantes que recorrían las orillas del río: "a los de las aceñas se le ha ido totalmente de las manos" , u "hoy me parece que no vais a poder no dormir nada, tenéis DJ sin pedirlo", nos escribían al WhatsApp.

No entendemos porqué se tienen que organizar eventos con tantos decibelios, con menos ruido también se disfruta y no se molesta a los vecinos. Pedimos que la música tenga el volumen más bajo y que así pueden pasarlo bien los asistentes a la fiesta, pero que no tengamos que sufrirlo los vecinos de alrededor.  Nos parece estupendo que la gente haga fiestas o ganen dinero con ellas, pero es necesario respetar el descanso de los demás.

Hay personas que trabajábamos al día siguiente, gente que se tenía que levantar pronto, también enfermos, personas mayores, opositores que madrugaban para ir a los exámenes (probablemente el día más importante de su vida, para el que tanto se han preparado, estropeado), o que simplemente querían estar tranquilos en sus domicilios con sus familias, pero el ruido excesivo de otra fiesta particular no lo ha permitido.

Creemos que el respeto mutuo, regular el ruido, y actuar cuando este se sobrepasa, es imprescindible para una buena convivencia y es algo propio de las sociedades libres y avanzadas. Es necesario exigirlo. 

Pedimos que los responsables recapaciten y no vuelvan a hacer algo así. Entendemos que deben ganar dinero, pero no a costa de nuestro descanso. Somos vecinos y zamoranos que consumimos habitualmente allí, y hasta ahora era un establecimiento que recomendábamos a nuestros amigos y conocidos (y esperamos poder volver a hacerlo), se lo hemos intentado explicar y esperamos que lo tengan en cuenta.  Se lo pedimos con educación, una vez más: por favor, déjennos descansar.  Huimos de los problemas y solo deseamos que este no se vuelva a repetir. Solo queremos dormir.

Sabemos que hay un amplio debate social sobre el tema de los ruidos en Zamora, y empezamos a creer que sí debe haber mayor regulación y que Policía e inspección municipal deberían actuar cuando observen que se está cometiendo alguna irregularidad con los decibelios o en la organización del evento. 

Es necesario pensar en colectivo, porque para que unos pocos disfruten y ganen, la mayoría no podemos salir perdiendo.