INCENDIOS FORESTALES
El viento complica el control del incendio de Porto
Hoy ha sido el último día de trabajo del equipo de bomberos de Melilla que ha formado parte del operativo antiincendios
En total, son diez los pueblos, entre León y Zamora, desalojados por los efectos de este fuego.
El incendio forestal de Porto de Sanabria sigue complicando las tareas de extinción incluso durante la noche, debido al viento cambiante en la zona y la dificil orogradía de algunas zonas, en las que no pueden actuar los bulldózer.
Durante el día, ya los fuertes vientos del sur, con rachas de hasta 60 kilómetros por hora, han hecho que el fuego superara las defensas establecidas y avanzara hasta la cumbre que separa las provincias de Zamora y León.
Según los datos facilitados por la AEMET en la zona noroeste, los vientos han soplado con constancia de entre 30 y 40 km/h, alcanzando rachas más intensas, que han complicado la labor de los equipos de extinción, no solo en el incendio de Porto, sino también en los incendios de Fasgar-Igüeña y Garaño, en León.
Durante las horas más críticas de la tarde, los medios desplegados en Porto han centrado sus esfuerzos en contener el avance de las llamas, con la esperanza de que la noche ofrezca mejores condiciones para trabajar.
El fuego avanza hacia la comarca de La Cabrera, en las provincias de León y Zamora, un territorio de valles con orientación norte-sur que, sumados al empuje del viento de poniente, facilitan una rápida propagación. Además, la orografía pedregosa de la zona dificulta el acceso de los bulldózer, lo que obliga a redoblar la estrategia sobre el terreno.
Ante estas limitaciones, los equipos de extinción han optado por una estrategia de pequeños contrafuegos, con la que se pretende ir cerrando progresivamente sectores del incendio para limitar su expansión.
Fotografía: Bomberos forestales de la BRIF de La Iglesuela del Tiétar
El incendio forestal de Porto de Sanabria sigue complicando las tareas de extinción incluso durante la noche, debido al viento cambiante en la zona y la dificil orogradía de algunas zonas, en las que no pueden actuar los bulldózer.
Durante el día, ya los fuertes vientos del sur, con rachas de hasta 60 kilómetros por hora, han hecho que el fuego superara las defensas establecidas y avanzara hasta la cumbre que separa las provincias de Zamora y León.
Según los datos facilitados por la AEMET en la zona noroeste, los vientos han soplado con constancia de entre 30 y 40 km/h, alcanzando rachas más intensas, que han complicado la labor de los equipos de extinción, no solo en el incendio de Porto, sino también en los incendios de Fasgar-Igüeña y Garaño, en León.
Durante las horas más críticas de la tarde, los medios desplegados en Porto han centrado sus esfuerzos en contener el avance de las llamas, con la esperanza de que la noche ofrezca mejores condiciones para trabajar.
El fuego avanza hacia la comarca de La Cabrera, en las provincias de León y Zamora, un territorio de valles con orientación norte-sur que, sumados al empuje del viento de poniente, facilitan una rápida propagación. Además, la orografía pedregosa de la zona dificulta el acceso de los bulldózer, lo que obliga a redoblar la estrategia sobre el terreno.
Ante estas limitaciones, los equipos de extinción han optado por una estrategia de pequeños contrafuegos, con la que se pretende ir cerrando progresivamente sectores del incendio para limitar su expansión.
Fotografía: Bomberos forestales de la BRIF de La Iglesuela del Tiétar
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