El Zamora CF busca esta tarde en Carballiño suturar la herida de Ourense

El partido que se juega esta tarde, a partir de las 16.15 horas, en Carballiño, se entiende para el Zamora CF como aquel que definirá su real potencial, su capacidad para estar entre la elite del grupo o pasar más tiempo del debido lejos de los puestos que den acceso a la fase de ascenso, porque se enfrentará al Arenteiro, un equipo duro, con buenos jugadores y que desarrollo su fútbol sobre un terreno complicado, donde jugar bien la pelota resulta complicado, además de presentar dimensiones más cortas, sobre todo en el ancho, que el resto de campos de la categoría.

No mereció, es cierto, el Zamora CF caer en octavo de final de la Copa Federación, pero dos decisiones parciales y consecutivas del árbitro del choque permitieron al Ourense empatar la eliminatoria a falta de cinco minutos para el finiquito, y, con anterioridad, el conjunto gallego debería haberse quedado con un hombre menos, porque Álvaro Romero, cuando encaraba la portería rival solo, sin ningún obstáculo, era objeto de una falta clarísima. Por lo tanto, aunque agua pasada no mueve molino, habrá que recordarlo.

Los clubes que ganan títulos o ascienden de categoría lo logran merced a sus plantillas, no a contar con un gran equipo inicial y tres o cuatro jugadores que sustituyan a los considerados titulares. El Zamora CF ha logrado este año formar un gran plantel de futbolistas. Todas las posiciones están duplicadas, apenas se nota la baja de un titular en el partido de Liga, porque su compañero lo suple con absolutas garantías. Esta tarde, Sabas intentará alinear inicialmente a los once jugadores que se encuentren en mejores condiciones físicas tras la paliza del partido y viaje, ida y vuelta de Orense. Como la plantilla me parece extraordinaria, la escuadra rojiblanca volverá a mostrarse poderosa, con potencial para ganar en el feudo de Arenteiro.

De poner defectos a este Zamora y también al de la temporada pasada, señalaría su debilidad en el fútbol aéreo, tanto en defensa, cuando se sacan faltas al área desde los laterales del ataque rival, o en los córneres, como en ataque, donde apenas se rematan lanzamientos al área rival o saques de esquina. Lo curioso es que esta temporada sí hay hombres de envergadura, de altura, carencia de la que se quejaba tanto el técnico madrileño en la temporada 2024-2025.

Déficit que Sabas y su cuerpo técnico deberían estudiar para que el equipo sea poderoso en ambas áreas.

No me atrevo, porque no juego a adelantar equipos titulares, a dar un once para enfrentarse esta tarde al Arenteiro, pero, convencido estoy que saldrán aquellos menos perjudicados por el partido de Orense.

Una victoria refrendaría el rol de los rojilblancos como equipo de elite en esta temporada. El empate, en principio, no valdría. Y la derrota, significaría una merma moral para todos los estamentos del club.