EL Balonmano Zamora perdió su primer partido de la temporada: 27-30

El partido comenzó con posesiones largas que hicieron que el marcador se moviera con lentitud. Sirva como ejemplo que el Covadonga no anotó hasta el minuto 4, una circunstancia que los pistachos no supieron sacar réditos, ya que solo habían marcado 1 gol en ese mismo periodo.

El partido se fue desperezando poco a poco y fue el visitante quien dio 2 veces, hasta ponerse por delante en el luminoso y llegar a estar con 3 goles de ventaja en el minuto 16 (6-9). Los pistachos reaccionaron y en minuto 25 empataban a 12 para irse al descanso con un 14-13 que no convencía según se desarrollaron los primeros 30 minutos.

Los temores se cumplieron en la reanudación, con un Covadonga que hacía los deberes poniendo el ritmo que le interesaba para volver a ponerse por delante en el marcador y mantenerlo hasta el final.

Como diría Mojón al final del choque, “hemos perdido ante un rival que no es superior a nosotros” y aunque reconocía el escozor de la derrota, “nos puede servir como algo positivo y saber que, en esta liga, cualquiera te puede hacer daño”. Aunque el equipo comenzó bien, poco a poco se fue diluyendo, surgiendo el problema que arrastran desde el principio de temporada, que no es otro que el porcentaje de fallos en ataque, en situaciones que parecen claras y no se concretan. “Tendremos que analizarlo para evitar que siempre el portero rival sea el mejor de su equipo”.

Todo ello, unido a esos bajones del equipo, que incluso se confía demasiado en poder remontar y no siempre será así, como se ha demostrado hoy. “Nos ha faltado criterio y malas decisiones, algo que habíamos entrenado, pero no hemos conseguido superar ante un equipo que defendía atrás, sobre la línea”.