POSTALES DESDE EL FARO
Los bordes
Patricio Cuadra Blanco
![[Img #103687]](https://eldiadezamora.es/upload/images/11_2025/795_patricio.jpg)
Buen día. No, no les voy a escribir sobre esas personas que según la R.A.E. son impertinentes, apáticas o mal intencionadas, sino sobre la locución preposicional que nos indica que estamos “muy cerca de”. Porque, a veces, uno no se da cuenta de lo cerca que está de algo hasta que ya lo ve ahí, presente, posible. Un estado donde se confrontan las finitudes y los misterios de la vida, como el miedo, la muerte o la duda, permitiendo una reflexión profunda sobre lo que somos y lo que nos rodea. Ya les digo yo que la situación sobre la que les estoy escribiendo no da, al menos en el momento, para una reflexión profunda sobre lo que somos. Porque en el momento en el que uno se encuentra en ese borde no es consciente de que lo está. En realidad no es consciente de casi nada, uno es un pelele manipulado por terceros desconocidos, y ni siquiera se da cuenta de esa manipulación. No debemos confundir los bordes con los límites, así, el límite es el fin, más allá del límite no hay nada, mientras que el borde es aquello mediante lo cual el límite hace contacto. El límite existe entre dos bordes diferentes, separa y une las entidades que delimita. En el borde uno se asoma al abismo, pero no lo supera. Hace unas semanas estuve al borde de la muerte, que dicho así suena como muy trágico, pero no soy yo de hacer dramas sin más. Para empezar, como me tengo por persona coherente, me enfrenté a la muerte como aparecí en la vida; desnudo y sin ser muy consciente de lo que estaba pasando. Después tuve que aprender a volver a hablar y a volver a caminar, que me ha llevado menos tiempo que la primera vez, y ya luego la cosa ha ido más o menos rodada. La primera conversación que tuve también la compartí con mi madre, como la primera vez, aunque en esta ocasión no fue para solicitar amantamiento, sino para bromear sobre la oportunidad perdida de haber celebrado el Día de los Santos por todo lo alto. No le hizo gracia. Tampoco le hizo gracia lo de haber pasado Halloween diciendo “susto o muerte” habiéndonos quedado en el susto. También les digo, la baza de usar lo de “hazme caso, que he estado a punto de morir” no está colando todo lo que yo me esperaba. Y sí, por hoy, ya estaría.
Puedes seguirme en twitter en @cuadrablanco. No es obligatorio.
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